El Alcalde asegura que la crisis económica y la ausencia de una financiación estable conduce a las entidades locales a una alarmante situación de "asfixia financiera"

Cámara reclama que el Gobierno cumpla su compromiso y aborde con celeridad una ley de financiación municipal

En los últimos años los ingresos de Plusvalía en Murcia han caído un 50%, las licencias de apertura el 42% y el ICIO el 80%

Al mismo tiempo, el Gobierno de la Nación reduce sus transferencias a niveles anteriores a 2006

La grave situación económica que atraviesa el país tiene en los ayuntamientos a la Administración más perjudicada, a la vez que ha puesto de manifiesto la necesidad de dotar a los entes locales de una financiación estable y adecuada.

En el momento en que ha aflorado la crisis, los ayuntamientos han dejado de percibir recursos extraordinarios derivados de la actividad económica. De esta forma, las arcas municipales se tienen que manejar ahora con los ingresos ordinarios, que son aquellos que provienen de las transferencias del Estado y de la propia capacidad impositiva. Como consecuencia de ello, aflora con más contundencia el déficit estructural en las financiación de los ayuntamientos.

Así se ha expresado esta mañana el Alcalde, Miguel Ángel Cámara, en la inauguración de las jornadas "Las Haciendas Locales ante la Crisis Económica" organizada por el Ayuntamiento de Murcia, la Comunidad Autónoma y la Universidad de Murcia. Han intervenido también en el acto la Consejera de Economía y Hacienda, Inmaculada García, y el Rector, José Antonio Cobacho.

El Alcalde se ha referido a la situación de las haciendas locales ante la crisis desde una triple perspectiva: la paralización de la actividad económica en la ciudad, con el consiguiente descenso en los ingresos corrientes por parte de las arcas municipales; la inexistencia de una ley estatal que regule adecuadamente la financiación local, pendiente más de 30 años; y el estrangulamiento de las haciendas locales como consecuencia de las decisiones fiscales y financieras por parte del Gobierno de España.

Por una parte, la paralización de la actividad económica repercute directamente en una caída de los ingresos corrientes. Plusvalía, ICIO y licencias de apertura son los ejemplos más notorios.

En el caso de la Plusvalía, los ingresos obtenidos en 2009 suponen la mitad de los recaudados cuatro años antes. Así, en 2006 se registró algo más de 16 millones de euros y en 2009 poco más de 8 millones.

Una caída de ingresos similar se ha producido en las licencias de apertura que, en el mismo período, han bajado el 42%, pasando de 2,2 millones a 1,3 millones de euros.

Más difícil aún ha sido la reducción en la recaudación del Impuesto de Construcciones. Sólo entre 2009 y 2008, el descenso ha sudo del 60%, un porcentaje que aumenta hasta el 80% si se tiene como referencia 2006. Este último ejercicio, los ingresos derivados de este impuesto fueron 31,8 millones de euros, similar a los obtenidos en 2007. Sin embargo, en 2008 apenas llegaron a 15,7 millones, mientras que en 2009 bajaron aún más, hasta situarse en 6,2 millones de euros.

Por otro lado, los ayuntamientos, como Administración más cercana, siguen prestando servicios "impropios", que no les corresponden, pero que son demandados por los ciudadanos. Esta situación acapara prácticamente el 30% del gasto de los ayuntamientos. Se asumen esas competencias pero no se cuenta con la financiación correspondiente.

Por eso, el Alcalde ha reclamado una vez más la necesidad de articular la participación de las entidades locales en los ingresos del Estado y las Comunidades Autónomas, cumpliendo así lo que dicta la Constitución Española sobre financiación local. Cámara ha recordado que el Presidente del Gobierno, en su discurso de investidura, se comprometió a abordar la creación de un marco de financiación estable para las administraciones locales, razón por la cual ha reclamado que “cumpla sus compromisos”.

El Gobierno de la Nación reduce sus transferencias

En tercer lugar, las medidas adoptadas por el Gobierno de la Nación, lejos de apoyar a los entes locales, han supuesto una reducción de su ayuda y han provocado un agravamiento de la situación financiera:

- Nunca se había producido lo que sucedió en 2009: el Ayuntamiento de Murcia recibió 7 millones de euros menos que en el año anterior.

- Los 76,5 millones de euros previstos en las transferencias del Estado en 2010 suponen volver al nivel anterior a 2006.

- En 2004, los recursos del Estado suponían el 24% de los ingresos corrientes del Ayuntamiento. En 2010 serán el 19,5%

- El incremento del IVA tendrá un coste para las arcas municipales previsto en unos 3 millones de euros.