El doctor en Educación Física de la Facultad de Ciencias del Deporte de la Universidad de A Coruña, Miguel Fernández del Olmo, ha impartido la conferencia ‘Estrategias rehabilitadotas en pacientes con la enfermedad de Parkinson’.
La actividad está enmarcada en el III Ciclo de conferencias ConcienCiaT que organiza por tercer año consecutivo el Vicerrectorado de Investigación de la Universidad Católica San Antonio (UCAM).
El experto en estímulos y rehabilitación de personas con Parkinson, Miguel Fernández, se ha centrado, entre otros aspectos, en los resultados de diferentes estudios que abordan el uso de señales sensoriales externas y los mecanismos neurofisiológicos implicados en la mejora de la marcha en pacientes con Parkinson.
El doctor Miguel Hernández ha señalado que “desde hace 15 años nuestro grupo de Aprendizaje y Control del Movimiento Humano, estamos desarrollando estrategias de rehabilitación para la mejora de la marcha parkinsoniana”.
Asimismo, ha detallado que “a medida que evoluciona la enfermedad se incrementan los deterioros de la marcha, llegando incluso a la pérdida de la capacidad de andar; el objetivo es mejorar su marcha y calidad de vida”.
Respecto a los resultados de diversas estrategias rehabilitadoras en pacientes con Parkinson, ha explicado, entre otras, la estimulación magnética transcraneal, así como las señales auditivas y las llamadas propioceptivas (por ejemplo, cintas o tapices rodantes para activar la marcha del paciente).
El doctor Hernández ha subrayado que “mediante la estimulación magnética transcraneal, que es una técnica relativamente reciente, se pueden estimular las zonas del cerebro afectadas de forma no invasiva; ya que no son necesarios impulsos eléctricos dolorosos”.
Por otra parte, ha incidido especialmente en la mejora de la amplitud de la marcha (zancada) en los pacientes más deteriorados que efectúan rehabilitación sobre un tapiz rodante, respecto a pacientes en un estadio más moderado de la enfermedad, lo que demostraría la eficacia de las señales propioceptivas”.
Estas señales, ha resaltado “constituyen generadores de un patrón central; contienen mecanismos atencionales; producen un feedback visual, y en suma, se produce lo que se denomina una estimulación sensorial propioceptiva”.