Milos Vujanic se mostraba optimista esta mañana en la rueda de prensa celebrada en el Palacio de Deportes con respecto a la clasificación del Club Baloncesto Murcia. Y es que, el base serbio recordaba que “aún quedan trece partidos”. “Hemos sufrido cuatro o cinco derrotas en casa que deberían haber sido victorias, pero no hay que lamentarse por el pasado, sino pensar en el futuro, en el próximo partido, que es una final para nosotros y hay que ir a por ella”, argumentaba.
“Hay que tener como referencia el partido de Fuenlabrada, porque defendimos muy bien, lo que luego nos facilitó el trabajo en ataque”, valoraba el ‘18’ murciano, mientras explicaba que “contra el Madrid, por ejemplo, nos metieron casi 40 puntos y sólo habíamos hecho dos faltas. Ésa es la manera de defender”.
En la pista del Lagun Aro GBC, “en primer lugar tenemos que ser agresivos y desde el primer momento, intentar luchar por el partido, no como contra el Real Madrid”. “Tenemos que lograr mayor concentración y estar más metidos en el partido. Este domingo, además, hay que jugar como si fuera una final, hay que matarse los cuarenta minutos, buscar sus puntos débiles y utilizarlos”, aseveraba.
Por otro lado, Vujanic comentaba que ha vivido “muchas situaciones, tanto buenas como malas, pero nunca una como ésta. En cualquier caso, hay que asumirla, hay que intentar luchar por la victoria en todos los partidos que nos quedan, porque tenemos que jugar 13 finales y no vale con ganar sólo en casa”. “En este sentido, hay que empezar por el próximo partido en San Sebastián”, matizaba.
A nivel personal, el serbio afirmaba encontrarse ahora “en la mejor forma de los últimos cuatro o cinco años”. “Pienso que da igual los puntos que meta si el equipo no gana, porque eso no me hace feliz… necesitamos que todo el equipo esté al 100% para conseguir luchar durante los cuarenta minutos que dura el partido”, consideraba.
Por último, el ‘uno’ balcánico realizaba autocrítica: “En defensa nunca he destacado, a veces por mis limitaciones físicas y otras por mí, pero también hay que valorar que yo llevo durante mucho tiempo el balón, lo que también supone que tenga más probabilidades que otros de perderlo. Intento mejorar eso en cada partido, pero soy humano”.