Científicos de la Universidad de Waterloo (Canadá) han conseguido realizar un prototipo de oftalmoscopio que detecta los cambios que se producen en la retina con la edad y que se basa en un descubrimiento anterior efectuado en el Laboratorio de Óptica de la Universidad de Murcia.
Este prototipo es una versión mejorada del que se desarrolló en el citado Laboratorio y las investigaciones que han culminado con su consecución han sido supervisadas por el profesor de la Universidad de Murcia Juan Manuel bueno, pionero en esta actividad científica.
Este nuevo oftalmoscopio permite, entre otras mejoras, una mayor rapidez en el registro de imágenes y más flexibilidad en la elección tanto de la zona de la retina a estudiar como en su tamaño.
Los oftalmoscopios comerciales con que se cuenta en la actualidad en hospitales y clínicas privadas están muy limitados en cuanto a prestaciones, ya que su objetivo es, básicamente, registrar imágenes de la retina que aportan información sobre ciertos tipos de patologías.
Sin embargo, hay patologías cuya existencia no se puede constatar hasta que están en un estado muy avanzado, en el cual, a veces, nos es posible dar marcha atrás.