1º- Es por completo falso que la Delegación de Alumnos haya expulsado a ninguna asociación de la sede que la propia Delegación tiene en el Aulario de la Merced.

El equipo actual de la Delegación, que tomó posesión de sus obligaciones el 21 de Noviembre del 2008, fue quien propuso la habilitación de dicho espacio para las asociaciones de la Facultad de Letras. Este acuerdo se consultó con los delegados de aula y se aprobó en Junta de Centro (órgano de gobierno de la Facultad de Letras).

La habilitación de dicho espacio ha requerido una inversión muy importante de recursos de todo tipo ya que se trataba de un lugar abandonado por los anteriores gestores de la Delegación de Alumnos.

Lo aprobado en Junta de Centro requiere de la puesta en marcha (ordenadores, teléfono, Internet y mobiliario adecuado) de este espacio, algo que no se ha producido hasta el momento y que depende del Servicio Técnico de la Universidad de Murcia, por lo que parece de sentido común que ninguna asociación pueda tomar posesión de ningún despacho. Más aún, cuando la entrada de las asociaciones al mismo requiere de la firma de un Convenio de Colaboración que ALUM no ha suscrito.

No hay que olvidar, asimismo, que en todo caso el titular de dicho despacho es la Delegación de Alumnos, y que, tal como se expuso en Junta de Centro, ésta se reservaba su uso exclusivo cuando lo requiriera su actividad, habiéndose puesto el ejemplo de la venta de tickets y pañuelos en las Fiestas de la Facultad. De esta forma, y aprovechando la reforma del despacho, la Delegación de alumnos propuso, a raíz de reivindicaciones continuas de diversos miembros de la Facultad, lanzar una campaña de fomento de voto (el año pasado votaron unas 400 personas de un censo de unos 2.200).

Pues bien, este acto de fomento del voto es, al igual que el uso en fiestas, una circunstancia extraordinaria que exige del uso del citado despacho, por el motivo principal de su privilegiado emplazamiento –al contrario que el despacho propio de la Delegación de Alumnos- en pleno Aulario, donde tiene lugar el trasiego de estudiantes, a quienes va dirigida esta actividad de fomento del voto.

2º- Es por completo falso que las Fiestas de San Isidoro no consten de una planificación adecuada. Es la Comisión de Fiestas, abierta a cualquier alumno y de la que no forma parte ningún miembro de ALUM, la que a través de sus propias reuniones dirige y coordina las actividades, que en la pasada edición y por primera vez ha dotado de imagen propia a las mismas (Invasiones Culturales y Representaciones Teatrales), alejándolas del tradicional consumo de alcohol.

El resultado de esta gestión, supervisada por la Delegación de Alumnos, ha dado como resultado no sólo la felicitación de la mayoría del alumnado sino de la totalidad del profesorado y del personal no docente, que también por primera vez han sido partícipes de las mismas. Por otra parte, también ha sido la primera vez que se han obtenido beneficios económicos, partidas que dan sustento entre otras cosas a las actividades de las asociaciones.

Sobre las empresas a las que se refiere ALUM queremos aclarar que fueron más de 15 los proveedores y, no, uno, los que trabajaron con la Delegación de Alumnos, prestando sus servicios a la festividad de San Isidoro.

3º- Es por completo falso que las graduaciones no hayan contado con la asistencia de la Delegación de Alumnos.

Han sido los miembros de la Delegación los que, a través de los diferentes servicios de la Facultad y la Universidad de Murcia, han realizado todas las gestiones y, por primera vez, una dotación económica, para que los alumnos/as de último curso gocen de su graduación.

4º- Es totalmente falso que la Delegación de Alumnos no haya informado sobre el Plan Bolonia o luchado contra la implantación del Máster de Profesorado; para ello retamos a cualquiera a que lea las actas de las Juntas de Centro o de las sesiones del CEUM.

5º- Es por completo falso que la Delegación de Alumnos descuide su representación en el CEUM.

Cualquiera puede leer las actas del Consejo de Estudiantes y leer las intervenciones que se llevan haciendo desde la fecha en la que el equipo actual tomó posesión, hace algo más de un año.

Sobre el tema presupuestario al que se refiere ALUM, hay que ser ciertamente ignorante para no saber que las partidas de las que hablan se reparten por cómputo de número de alumnos matemáticamente en proporción a cada facultad, por lo que no cabe “defensa de interés” ninguno, sino entender que por tantos alumnos tanto dinero… sin más.

6º- A nivel aclaratorio, hay que saber que la representación oficial de la Facultad corresponde a la Delegación de Alumnos de la Facultad de Letras, votada por todos los alumnos/as y no a una asociación privada.

Lamentamos que algunos directivos de ALUM se empeñen en hacer daño a su propia facultad con el único objetivo de ganar las próximas elecciones, que para ello no sólo emitan comunicados de prensa sino que además falten el respeto personal a quienes no comparten su ideología política claramente marcada y que en ningún momento se hayan preocupado por exponer sus inquietudes o propuestas.

Pensamos que el trabajo de tantísimas personas no va a quedar por los suelos y retamos a quien sea a probar UNA SOLA de las acusaciones vertidas a la prensa, y que se haga con documentación y en sede judicial o, bien, se retiren. De lo contrario se tomarán las medidas oportunas a través de los Servicios Jurídicos de la Universidad de Murcia.

Defendemos la integridad y honestidad de TODOS los miembros de la Delegación de Alumnos de la Facultad de Letras y no permitiremos que el ansia de poder de nadie unte el nombre de los alumnos o de la Facultad de Letras.

Carlos Martínez H. “Camarón”
Delegado de Alumnos de la Facultad de Letras.