Murcia, 11 oct (EFE).- El Real Murcia, que anoche empató ante el Córdoba a uno y cosechó su sexta igualada consecutiva, ha vuelto a ocupar puesto de descenso a Segunda División B 29 jornadas después, lo que hace peligrar la continuidad de José Miguel Campos en el banquillo grana.
El conjunto murcianista, que en principio partía con el objetivo de ascender a Primera, es uno de los dos equipos de la categoría que todavía no conocen la victoria -el otro es el colista Castellón- y, aunque sólo ha perdido un encuentro, en la primera jornada ante el Nástic de Tarragona (0-1), tantos empates lo condenan a estar en la cola de la clasificación, con seis puntos sumados en siete jornadas. Actualmente es el décimo octavo clasificado, con la misma puntuación que el Celta de Vigo, décimo noveno; y el Villarreal B, vigésimo; y sólo más que el Castellón, que lleva uno.
El cuadro grana no estaba en posición de descenso desde el 17 de enero, día en el que salió de la zona de castigo al ganar por 2-3 en el feudo del Salamanca.
Ese resultado, en el tercer partido que Campos dirigía al frente del Murcia tras sustituir al destituido Javier Clemente, suponía salir de la quema, algo que refrendó en las siguiente jornadas con sendas victorias ante el Córdoba y el Celta de Vigo, lo que redondeó una extraordinaria racha de cinco triunfos en los cinco primeros partidos de la era Campos.
En el ejercicio 2008/2009 el Murcia, pese a no realizar un fútbol brillante, al menos certificó la permanencia con el técnico mazarronero, algo que parecía complicado dada la trayectoria de su predecesor, y ha estado fuera de los puestos de descenso durante las últimas 29 jornadas de la campaña anterior y las seis primeras de la presente.
Sin embargo, de cara al objetivo del ascenso, las perspectivas siguen siendo malas y la ejecutoria del equipo es casi tan deficiente como la pasada campaña a estas alturas del campeonato.
Entonces, el equipo murcianista sumaba cinco puntos en siete jornadas y su bagaje era de una victoria, dos empates y cuatro derrotas, con tres goles marcados y siete encajados y ahora sólo tiene un punto más y su balance goleador es de siete tantos a favor y ocho en contra. EFE