La directora general de Transportes y Puertos de la Consejería de Obras Públicas y Ordenación del Territorio, Carmen Sandoval, informó hoy de que las obras de la nueva vía ciclista que conectará la avenida Juan Carlos I de Murcia con el campus de Espinardo, a través de Los Rectores, el vial de Terra Natura y el actual puente de la A-7 que da acceso a la Universidad de Murcia (UMU), comenzarán el próximo lunes.
Esta actuación forma parte del proyecto de construcción del carril bici que conectará los campus universitarios de Espinardo y Los Jerónimos con el centro de Murcia. La actuación tiene un coste de 393.467 euros, que han sido financiados en un 75 por ciento por la Consejería, mientras que el Ayuntamiento de Murcia ha aportado el 25 por ciento restante.
La directora general recordó que las obras del tramo que une la Mota del Río con la Universidad Católica San Antonio de Murcia (UCAM) ya están iniciadas y adelantó que la primera semana del mes de octubre se iniciará la construcción del itinerario que cierra la UMU con la UCAM.
Carmen Sandoval señaló que “esta nueva red ciclista que se articulará en torno a la zona norte y oeste de Murcia discurrirá por la avenida Juan Carlos I hacia Espinado y conectará la Universidad de Murcia con la Universidad Católica San Antonio, hasta el carril bici existente que se inicia en El Malecón”. La vía tendrá una longitud total de 13,6 kilómetros, de los que 8,3 serán de nueva construcción.
La nueva red de carril bici contempla cuatro modalidades diferentes: acera bici (carril bici compartido con acera o itinerario peatonal), carril bici segregado (carril bici adyacente a la calzada pero protegido con pivotes o bolardos), pista bici (carril bici independiente del tráfico rodado y peatonal, o paralelo a una calzada de tráfico rodado) y vía amable (sección mixta para tráfico rodado y carril bici con limitación de velocidad a 30 kilómetros por hora que, normalmente, trascurre por caminos de huerta).
“El objetivo de este plan, apuntó la directora general, es dar respuesta a las demandas de los ciudadanos de la Región y fomentar medios de transporte alternativos al vehículo privado a través de la implantación progresiva de una nueva cultura de la movilidad fundamentada en la calidad ambiental y el ahorro económico y energético, potenciando el transporte público y la circulación peatonal y ciclista”.