El consejero de Agricultura y Agua, Antonio Cerdá, y el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, presentaron hoy el Plan integral de prevención y defensa contra incendios forestales del Parque Regional El Valle-Carrascoy, que contará con una inversión de 1.890.000 euros durante el período 2009-2012.
El Plan tiene como principales objetivos analizar el riesgo actual de incendios forestales, establecer pautas para concienciar y conciliar intereses (con especial incidencia en las zonas urbanizadas limítrofes y las enclavadas en el Parque), así como crear un programa de vigilancia disuasoria y mejorar las infraestructuras para la defensa contra incendios forestales.
El consejero señaló que el Parque Regional El Valle-Carrascoy es “uno de nuestros espacios más emblemáticos”. Cuenta con una superficie de 17.410 hectáreas que abarcan los términos municipales de Murcia, Alhama de Murcia y Fuente Álamo. Además, está declarado Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).
La vegetación predominante es el pinar (Pinus halepensis) y entre el matorral destacan las especies de romero, coscoja, albaida, espino negro y herbáceas como el esparto. Entre su fauna las aves constituyen el grupo más importante, con la presencia de especies como el Búho real, Águila real, Halcón peregrino, Culebrera europea y Águila-Azor perdicera, entre otras. También destaca la presencia de mamíferos, como Lirón careto, Gato montés, Tejón y Ardilla común, así como seis especies de anfibios y 12 de reptiles.
Cerdá puntualizó que, por su condición de parque periurbano, “el monte El Valle es una zona de uso público que cuenta con importantes instalaciones medioambientales, ya que es el Parque Regional mas visitado, con un millón y medio de visitas anuales”.
El consejero recordó que en el período 1983-2006 se produjeron en este Parque un total de 168 incendios. El 35 por ciento de ellos fueron motivados por negligencias humanas y el 24 por ciento fueron intencionados. La mayor parte de los incendios se produjeron en los meses de julio (22 por ciento), junio y agosto (20 por ciento) y septiembre (12 por ciento).
El 69 por ciento del Parque Regional tiene una peligrosidad muy alta de incendios forestales, debido a las condiciones climáticas, al tipo de vegetación existente y a las pendientes que hay en esta zona.
Aspectos del Plan
La Consejería ha establecido tres rutas de vigilancia disuasoria, con diferentes ramales, a lo largo de los principales enclaves del Parque Regional. En total se recorrerán 53´7 kilómetros de las zonas de El Valle, sierra de El Puerto y Majal Blanco, por miembros de Protección Civil en colaboración con Agentes Medioambientales.
Asimismo, en los puntos de acceso al monte se controlará e informará sobre los riesgos de posibles incendios forestales y durante la época de peligro alto se cerrarán algunos caminos del monte para impedir el acceso a vehículos motorizados.
La Consejería ha codificado los principales viales del interior del Parque con el objetivo de generar una red que lo vertebre y permita el acceso a las zonas más peligrosas. Se mejorarán 26 kilómetros de caminos y se abrirán seis kilómetros de nuevos caminos en la zona de Carrascoy.
Asimismo se han realizado inventarios de los puntos de agua existentes en el Parque susceptibles de ser utilizados en caso de incendios forestales, así como de los hidrantes pertenecientes a la red municipal de Torreguil, El Palmar, La Alberca, Santo Ángel, Algezares, Los Garres y San José de la Montaña.
La Consejería construirá cinco nuevos depósitos de agua, de 100.000 litros de capacidad, semienterrados, para abastecer a los medios terrestres, que estarán situados en El Cerrillar, sierra del Puerto, el Majal Blanco, Las Navetas y las cercanías del pico de Carrascoy. Asimismo, se fomentará la instalación de hidrantes en las balsas de riego de más de 75 metros cúbicos y de fácil acceso para los medios terrestres en las inmediaciones del Parque.
Áreas Cortafuegos
El Plan incluye la creación de una red de áreas cortafuegos de 43 kilómetros de longitud, que ocupará una superficie de 300 hectáreas y que presentará una mayor densidad en la zona de El Valle, donde el riesgo de incendios es mayor. Asimismo, los cortafuegos existentes se adaptarán al diseño de las áreas cortafuegos por suponer un menor impacto paisajístico.
También se creará una red de áreas cortafuegos perimetrales de 15´5 kilómetros en los perímetros de las zonas urbanizadas, que protegerán los núcleos situados en el límite del Parque Regional, tales como Algezares, Teatinos, La Alberca y las proximidades del Cigarrón.
En los márgenes de los principales viales que atraviesan el Parque se construirá una red de fajas auxiliares de pista de 60 kilómetros (24 nuevas fajas en una superficie de 360 hectáreas), para dificultar el avance del fuego y disminuir el riesgo que los viales suponen para el inicio de incendios forestales.