Murcia, 28 ene (EFE).- El máximo accionista del Real Murcia, Juan Manuel Trujillo, anunció hoy tras la reunión del consejo de administración de la entidad, la decisión de no acogerse a la ley de procedimiento concursal, por una deuda próxima a los 30 millones de euros y negó que se hubiera puesto en peligro la supervivencia del club.

En rueda de prensa, Trujillo aseguró que "el apoyo expresado por las autoridades, especialmente el Ayuntamiento de Murcia, y el excelente rendimiento del equipo, que nadie se esperaba" han motivado que se replantee una decisión que prácticamente era inevitable a tenor de las cuentas del club.

El empresario explicó que las decisiones económicas y judiciales que se iban a tomar estaban motivadas por las recomendaciones de una asesoría externa a la que se había encargado un informe de la situación.

Añadió que, al conocer la predisposición de las autoridades a colaborar y dado el buen momento del equipo, han pedido a esta consultora que condicione sus recomendaciones a estas circunstancias.

Juan Manuel Trujillo subrayó que "el Real Murcia puede valer 500 millones o tres euros, pero en ningún caso se ha puesto en peligro su supervivencia. Siempre existirá porque no vamos a permitir que desaparezca".

Asimismo, explicó que en el Real Murcia "nunca ha habido bonanza económica, puesto que todos los años había pérdidas que nuestras empresas cubrían".

Trujillo agregó que las decisiones a adoptar sobre el futuro económico del club se volverán a considerar en el próximo consejo de administración, que se celebrará el mes que viene.

A preguntas de los periodistas, Trujillo se negó a valorar la gestión del anterior presidente y cuñado, Jesús Samper, aunque reconoció que en el análisis de las cuentas han aparecido cosas "sorprendentes", en referencia a "mucho dinero pagado en fichajes o en sueldos".

También dijo que la delicada situación del club se debe a que no se han cumplido las expectativas con las que se elaboró el presupuesto para esta temporada.

Con respecto a los cobros de los jugadores, Juan Guillamón, presidente del club, designado por Trujillo, dijo que "se les ha dicho que estén tranquilos porque nos comprometemos a pagarles todo, aunque aún no sabemos cómo".

Por su parte, el vicepresidente deportivo, Manolo Álvarez, anunció un cambio de política para el año que viene, anticipando que "como no podemos pagar mucho en los fichajes, vamos a mirar más a la cantera, y probablemente el año que viene estén en el equipo cuatro jugadores que actualmente están en el filial y otros dos del juvenil de División de Honor".

La reunión del consejo, que comenzó una hora más tarde de lo previsto, se prolongó hasta las 20,30 horas, cuando el propietario de la entidad compareció ante los medios de comunicación, a los que no se había autorizado a acceder a las instalaciones del club, para informar de la decisión, que durante todo el día de ayer se dio por hecho, por una deuda de unos 30 millones de euros.

Esta mañana el alcalde de Murcia, Miguel Ángel Cámara, ofreció una rueda de prensa urgente en la que aseguró que el Ayuntamiento era "capaz de garantizar" los gastos para que el Real Murcia terminara la temporada sin problemas económicos y sin necesidad de acogerse al concurso de acreedores.

En la misma, Cámara manifestó su total disconformidad con la gestión del Real Murcia en los últimos meses, calificó de "inadecuado" el momento de presentar ese concurso, por encontrarse el club en "su mejor momento deportivo de la temporada, con cinco victorias consecutivas".

El alcalde además mostró su enfado por los "dos meses de dudas provocados por los propietarios", y aseguró que "si quieren irse tienen la puerta abierta", al tiempo que desveló que el concejal de Deportes, Miguel Cascales, se había reunido con el propietario de la entidad, Juan Manuel Trujillo, para buscar alternativas.

Trujillo, que llegó con una hora de retraso a la Nueva Condomina para asistir a la reunión del consejo de administración, fue abucheado por un centenar de seguidores del club que protestaban por la decisión que se había difundido.

La demora se debió a que Trujillo y Guillamón habían mantenido un encuentro con los jugadores del primer equipo, en el que el presidente les tranquilizó y les anunció que, "por el momento", los propietarios no se iban a acoger a la Ley Concursal. EFE