La Concejalía de Sanidad, que dirige Fulgencio Cervantes, comienza mañana, miércoles día 17 de diciembre, las inspecciones para detectar ácido bórico en los mariscos. La primera inspección se realizará a las 10.00 horas en las pescaderías del Mercado de Verónicas. Un equipo de veterinarios recorrerá todas las plazas de abastos del municipio y las pescaderías para detectar el uso de esa sustancia prohibida.
El ácido bórico es un conservante en polvo que se echa al marisco para que no se ponga negro y dure más. El uso de ácido bórico está prohibido desde 1983 porque puede perjudicar a la salud de las personas.
Los veterinarios escogen un ejemplar de crustáceo y le aplican unas tiras reactivas en las patas y la cabeza, que es la zona más húmeda de los mariscos. Si las tiras cambian de color el marisco puede contener ácido bórico. Entonces se realiza otro análisis más exhaustivo con equipos especiales en el mismo puesto y si de nuevo la prueba es positiva se inmoviliza la partida y se llevan varios ejemplares al laboratorio para volver a analizarlos. Si se demuestra la presencia de ácido bórico se destruye la mercancía y se abre un expediente sancionador al vendedor. La Concejalía de Sanidad realiza toda las Navidades esta campaña de detección de ácido bórico para garantizar a los consumidores la calidad de los productos.