Madrid, 29 ago (EFE).- El Estadio Teresa Rivero se viste de gala en su regreso a la división de plata para recibir al Murcia en un encuentro que el Rayo Vallecano lleva esperando cuatro años y para el que la afición llenará las gradas.
Han vuelto con ganas e ilusión renovadas dispuestos a ser la "sorpresa", tal y como ha reconocido Pepe Mel. Y es que han tenido que pasar cuatro años para que Vallecas vuelva a disfrutar del fútbol de segunda.
Los rayistas se presentan mañana con un equipo que se ha renovado con el objetivo de la permanencia en mente, pero que no descarta colarse entre los candidatos al ascenso al final de temporada.
Muchas han sido las incorporaciones que ha realizado la directiva rayista, entre las que destaca un nombre, el delantero David Aganzo, que ha sido señalado por todos, incluida la presidenta, como el jugador en el que va a recaer esta temporada la responsabilidad del gol.
El ex madridista y el resto de caras nuevas intentarán que lo conseguido en mayo ante el Zamora en la fase de ascenso no sea flor de un día y que el Rayo vuelva, no dentro de mucho, a codearse con los más grandes.
En el penúltimo entrenamiento previo al partido del sábado se ha podido comprobar que Mel tiene el once titular que saltará a las 18:30 horas prácticamente decidido, pero "con la prudencia que te marca que todavía haya una sesión de trabajo de por medio", ha declarado el técnico madrileño.
Respecto a las negociaciones que se estaban llevando a cabo estos últimos días para la salida del portero David Cobeño al Getafe, Mel ha querido dejar claro que ese asunto "está cerrado" y que Cobeño es un jugador más de la plantilla rayista para esta temporada.
Y en este contexto llega a Vallecas el conjunto de Javier Clemente, descendido de Primera y que tiene como único objetivo recuperar la categoría.
Se trata de un equipo totalmente distinto al que fracasó el año pasado en Primera División, hecho a la medida de Clemente, técnico que compite por primera vez en su carrera en la "categoría de plata".
Sus once fichajes (además de la "repesca" de Bruno, cedido en el Salamanca y el salto desde el filial de Aquino y Alberto) le han convertido en uno de los equipos más activos en el mercado este verano en Segunda División.
A pesar de su indudable caché, catorce de los 24 jugadores de la plantilla murcianista (además del entrenador) no han jugado ni un solo partido en Segunda División en su carrera, por lo que, aunque parte como uno de los equipos favoritos, su rendimiento es toda una incógnita.
Clemente no podrá contar mañana con el portero uruguayo Fabián Carini, con el interior derecho David Cuéllar, ni con el mediocentro Abderramán Kabous, todos ellos lesionados.
El técnico vasco parece tener muy claro a los ocupantes de la retaguardia, con Elia en la portería, y Campos, Mejía, Ochoa y Paco Peña en la defensa, si bien maneja varias opciones para el medio del campo y la delantera.
Parece que el brasileño Marcinho Guerreiro y Quique de Lucas tienen plaza fija en el doble pivote, así como Antonio Núñez en la banda derecha. En la izquierda, Dani Aquino parece que será titular, pero la fulgurante aparición de "Bouba" Dialiba, jugador a prueba al que ayer mismo se le hizo contrato, le da opciones de ser titular.
Arriba, tras una buena pretemporada, el serbio Ranko Despotovic parece un fijo, mientras que el puesto de segundo delantero se lo jugarán el polaco Adrian Sikora y el uruguayo Iván Alonso.
Alienaciones probables:
Rayo Vallecano: Cobeño, Carlos de la Vega, Tena, Amaya, Serrano, Enguix, Míchel, Albiol, Collantes, Pachón y Aganzo.
Real Murcia: Elia; Campos, Mejía, Ochoa o Lillo, Paco Peña; Núñez, Marcinho Guerreiro, De Lucas, Aquino; Despotovic y Sikora o Iván Alonso.
Árbitro: Pérez Montero (C. Andaluz)
Estadio Teresa Rivero, 18.30. EFE