El pasado 26 de julio la Asamblea Regional de la Comunidad de Murcia aprobaba una toma en consideración para proposición de Ley de modificación de la Ley de Costas. Es el primer paso para el cambio de una Ley de 34 años de antigüedad, que ya no responde a la realidad de los territorios. Con esta proposición se pretende proteger poblados marítimos que forman parte de nuestra historia, estilo de vida y están amenazados a su desaparición.

Ayer sábado 17 se reunieron en Cartagena representantes de la Federación de Núcleos afectados de la Región y del Movimiento SOMOSMEDITERRANIA que impulsan más de 40 Asociaciones del litoral Mediterráneo, para conocer los detalles de la Proposición de Ley y recibir el apoyo para su aprobación en la Comisión Legislativa que se inicia.

"Esta proposición debe ser el inicio de un cambio legislativo en profundidad de una Ley que durante años ha demostrado no proteger las playas del litoral español", comenta Manuel López, uno de los impulsores de SOMOSMEDITERRANIA, "es necesaria una nueva planificación que sea proteccionista y no destructiva".

En la reunión estuvieron presentes representantes de varias Asociaciones de la Región de Murcia y del Movimiento SomosMediterrania, que el pasado 6 de agosto realizaron una macro-manifestación simultánea, en más de 30 municipios costeros, para pedir al Ministerio para la Transición Ecológica, una nueva Ley en la que se tengan en cuenta las directrices vinculantes del Parlamento Europeo, coherente con las del Consejo de Estado y que tenga en cuenta los derechos constitucionales de los ciudadanos.

Solo en la Región de Murcia, hay más de 400 viviendas, algunas centenarias, de las playas de Puntas de Calnegre en Lorca, Nares en Mazarrón, los Nietos y Cabo de Palos en Cartagena, amenazadas para su destrucción, a pesar de haber sido construidas todas ellas dentro de la legalidad.

"Yo crecí en Cabo de Palos, un espacio natural que forma parte de mi, y yo formo parte de él, comenta José Antonio Luque de 80 años, "he transmitido esos valores a mis hijos y ahora a mis nietos. Llevo años luchando por defender mi única vivienda, que heredé de mis padres, y los derechos de los que hemos dado vida a esta maravilla de la naturaleza, Ahora no nos pueden arrancar de cuajo esos derechos, las Leyes deben actuar priorizando el respeto a las personas, a nuestra cultura y al medioambiente".

Son miles de ciudadanos que apelan a la sensibilidad de los representantes políticos, para que protejan las playas con sus los arenales, las infraestructuras municipales y los bienes de los ciudadanos. Unos espacios integrados en la naturaleza que forman parte de nuestro paisaje, patrimonio, historia, cultura y estilo de vida, es nuestra identidad como pueblo.

Ahora se espera con optimismo la tramitación en la Cámara, ante la excelente acogida de los portavoces de todos los grupos, para que se lleve a la aprobación unánime.