17 agentes de Policía Nacional trabajan en África Occidental para colaborar con gendarmerías e instituciones en el desmantelamiento de redes de trata y en la prevención
El tráfico de órganos, las competiciones deportivas o los viajes de peregrinación son tendencias al alza en la trata de personas de Nigeria, según un estudio elaborado por el proyecto europeo de cooperación policial A-TIPSOM Nigeria
La mayor parte de los flujos exteriores de tráfico de personas en Europa occidental y meridional proceden de África subsahariana
Un total de 25 agentes de la Policía Nacional se encuentran en estos momentos desplazados en proyectos de cooperación internacional llevados a cabo con la FIIAPP en todo el mundo, de los cuales, 17 están desplegados en proyectos internacionales contra la trata en países de África Occidental, financiados por la Unión Europea. La lucha contra la trata es una prioridad dentro de las competencias asignadas a la Policía Nacional, además de ser una actividad delictiva compleja con un claro entramado internacional, a la que se hace frente desde una perspectiva de cooperación policial internacional que abarca todos sus escalones.
África es la segunda región del mundo, por detrás de Asia, con más víctimas de trata. Solo en 2020 se registraron 28.500 casos. Nueve de cada diez víctimas en el mundo son mujeres y niñas. La mayor parte de los flujos exteriores de tráfico de personas en Europa occidental y meridional proceden de África subsahariana. Muchas lo son para fines de explotación sexual mientras que las redes de trata dentro de la región de África occidental se centran en la explotación laboral.
El tráfico de órganos, las competiciones deportivas o los viajes de peregrinación son tendencias al alza en la trata de personas de Nigeria, según un estudio elaborado por el proyecto europeo de cooperación policial A-TIPSOM Nigeria.
“Trabajar en los países de origen es fundamental para desmantelar las mafias de la trata. La explotación de personas, sea sexual, laboral o para tráfico de órganos es uno de los peores crímenes y Policía Nacional tiene protocolos y mecanismos de referencia que compartir con el mundo”, explica Rafael Ríos, inspector de policía y coordinador del proyecto A-TIPSOM Nigeria que, financiado por la Unión Europea, moviliza a miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad para trabajar con sus homólogos en Nigeria.
Ríos resume así los logros de un proyecto emblemático contra la trata tras cuatro años de ejecución: “hemos trabajado mano a mano en prevención, para que potenciales víctimas en zonas rurales o desfavorecidas puedan identificar los mecanismos de captación de las mafias. Hemos rehabilitado 17 centros de atención a víctimas en el país -una protección fundamental para que cuando son liberadas no caigan en una nueva victimización-, hemos impulsado medidas legislativas y protocolos para que todos los actores involucrados (por ejemplo instituciones de inmigración, seguridad e igualdad) se coordinen, y hemos colaborado con formaciones y medios técnicos que han aumentado sustancialmente el número de tratantes detenidos y condenados”.
El responsable policial destaca también el importante retorno que este tipo de proyectos tiene para Europa a la hora de acercar administraciones: “ahora cualquier petición de información emitida por países como España, Francia, Países Bajos o Italia es atendida por las autoridades nigerianas con mucha mayor eficacia”, lo que permite un abordaje del problema en origen y en destino de trata.
Un estudio reciente elaborado por el proyecto señalaba las visitas culturales o deportivas y religiosas como tácticas crecientemente empleadas por los traficantes de personas. La policía ha desarrollado numerosas actividades de prevención en el país basadas en el uso de las redes sociales, tanto para que potenciales víctimas sepan identificar estos engaños como para identificar a los perpetradores.
Reducción del número de víctimas en Níger
En el proyecto europeo ECI-Níger participan cuatro agentes de Policía Nacional, con el objetivo de luchar contra las redes criminales en este país mediante la creación de un equipo conjunto de investigación (ECI) en el seno del Servicio Central de Lucha contra el Terrorismo y el Crimen Transnacional Organizado (SCLCT/CTO). “Cuando nuestro proyecto empezó, encontramos en el desierto, en condiciones deplorables, a más de 2.000 personas víctimas de redes de trata. Este año apenas han sido 20, lo que nos da alas para seguir cooperando hasta que ninguna persona más sea víctima de trata, ya sea con fines de explotación sexual, laboral o de niños para ejercer la mendicidad”, dice Fernando Guerrero, policía nacional que llegó al país hace casi cuatro años para coordinar el proyecto europeo ECI-Níger.
Guerrero señala que uno de los retos más importantes es superar los tabúes culturales que muchas veces sostienen la trata. “Una de nuestras últimas intervenciones con la Policía Nacional nigerina se ha dirigido a desarticular grupos de marabúes que, bajo la forma de supuestas escuelas coránicas, obligaban a niños y niñas a ejercer la mendicidad en la calle”. Guerrero señala que actualmente se están centrando en mejorar la atención a víctimas en dependencias policiales: “queremos garantizar un bien jurídico protegido como es la dignidad humana”.
25 policías desplazados en proyectos de cooperación internacional con la FIIAPP
Desde la División de Cooperación Internacional se considera fundamental a nivel estratégico en la lucha contra la trata de seres humanos las actuaciones impulsadas tanto a nivel bilateral, como a nivel multilateral mediante la participación de policías nacionales en estos proyectos internacionales desarrollados en las países de origen. Todo ello va a permitir crear un ambiente de confianza mutua con sus autoridades mediante un trabajo diario conjunto con un mismo fin, además de conocer y entender la problemática propia y singular de cada país.
“La Policía Nacional es una de las instituciones españolas más comprometidas con la cooperación internacional. Trabajan mano a mano con gendarmerías, policías e instituciones de justicia de otros países en ámbitos como la investigación policial, la lucha contra el crimen organizado, el desmantelamiento de redes de trata y de personas migrantes o la protección de espacios públicos ante ataques terroristas. Desde la FIIAPP estamos convencidos de que la seguridad y la paz son pilares para el desarrollo y trabajamos para movilizar el talento público de las instituciones españolas en esta dirección”, explica Lourdes Sartorius, directora adjunta de Seguridad, Paz y Desarrollo en la FIIAPP. 25 policías están desplazados en este momento con FIIAPP en todo el mundo, pero son muchos más quienes se involucran en misiones de corta duración para formaciones o talleres específicos.