Imaginemos permanecer sin electricidad durante dos semanas consecutivas. La mayoría de los ceutíes probablemente no podamos, aunque a los apagones por horas sí que estamos acostumbrados. En el año 2013, una paralizante tormenta de hielo barrió a Estados Unidos y Canadá, dejando a más de un millón de personas sin electricidad. La energía se restableció en pocos días para muchos pero en otras áreas sin embargo, tomó semanas en reparar las líneas y volver a encenderlas.
¿Están las administraciones de Ceuta preparadas para atender a toda la población en caso de quedarse sin electricidad durante un tiempo indeterminado? ¿Existe alguna estrategia preparada para que en este hipotético caso se actúe con éxito? ¿Hay algún plan de contingencias donde el abastecimiento de comida esté garantizado? Hablando claro y llanamente no, por lo que sería una buena idea que en el próximo Pleno se empezara a hablar de este suceso y así lo afirmaba Murphy antaño: " si algo puede salir mal, saldrá mal".
Este acontecimiento pandémico ha pillado a nivel mundial a todos los gobiernos fuera de juego, de eso no cabe duda, por lo que habría que prepararse para cualquier cosa, como un corte de energía, por ejemplo. La ciudad no está preparada para nada, vive al día, dependiendo del dinero que el Gobierno central le da. A todos nos suena como algo irreal, lejano e improbable el hecho de que algo tan descabellado pueda acaecer en pleno siglo XXI, en la era de la tecnología, pensamos que los de arriba no consentirán que esto pueda suceder. Pero la realidad es que nuestras redes eléctricas son mucho más frágiles de lo que parecen. Las redes de nuestra ciudad se enfrentan a amenazas regulares como las tormentas comunes y desastres naturales, que en algunas áreas, pueden tardar en solucionarse.
Tampoco podemos obviar los ciberataques y actos de terrorismo y la red eléctrica es un objetivo que está en continuo peligro. Austria lanzó una serie de recomendaciones para que sus ciudadanos se abastecieran con utensilios para afrontar una posible crisis de suministro eléctrico en los próximos años y Cataluña está iniciando preparativos por si esto tiene lugar, así que tal y como dice nuestro refranero español: cuando las barbas de tu vecino veas cortar, pon las tuyas a remojar.
Nuestra ciudad a día de hoy ha demostrado la no coordinación con Delegación del Gobierno, solo hay que echar la vista atrás para ver que cada uno ha bailado a su son, así que sería de extrañar que tomaran decisiones al unísono, pero cuando se trata del bien del ciudadano tendrían que dejar a un lado sus rencillas y remar en una única dirección y planificar una estrategia de coordinación entre todos los agentes policiales, sociales y Protección Civil para poder dar soluciones en caso de que este hecho suceda.
José Antonio Carbonell Buzzian
