El próximo 5 de junio es el Día Mundial del Medio Ambiente. Proteger y cuidar nuestro planeta es una responsabilidad de todos y por lo tanto algo que debemos enseñar a los niños desde bien pequeños. En la medida de sus posibilidades y con pequeños gestos, sus acciones pueden marcar una gran diferencia. Por este motivo, COLORBABY, empresa distribuidora en España de Super Cute, las bebés superheroínas que siempre están listas para salvar el planeta, proponen 7 pequeños gestos para que los más pequeños aprendan a cuidar y respetar la naturaleza.
Cierra el grifo mientras te cepillas los dientes o te enjabonas las manos. El ahorro de agua es primordial si queremos proteger nuestro planeta. Por ello es bueno enseñar a los niños a cerrar el grifo y no dejar correr el agua mientras se cepillan los dientes o se enjabonan las manos. ¿Sabías que de esta forma se pueden llegar a ahorrar 6 litros de agua por minuto?
Regálale una planta para que la cuide. Enseñar a los niños que las plantas y las flores son seres vivos hará que respeten la naturaleza. Para enseñarles la importancia de ese pequeño gesto plantar una planta en casa y que sean ellos quienes la cuiden, puede ser una forma de inculcarles el amor y el respeto por la naturaleza.
Amarillo, azul, verde, marrón ¡reciclar es divertido! Los niños de hoy son los adultos del mañana. Y aunque cada vez reciclamos más, es importante que las generaciones futuras lo sigan haciendo. Para ello, puede ser más fácil si los más pequeños lo ven como el gran juego de los colores. El papel de regalo al cubo azul, el bote de tomate frito al verde, la piel del plátano al marrón y el brick de la leche al amarillo.
Usa la energía eléctrica de forma responsable. Recordar a los niños que apaguen la luz de su habitación cuando no estén en ella, que apaguen la tele cuando dejen de verla o su consola cuando no estén jugando son algunos ejemplos para que aprendan a usar la energía eléctrica de una forma respetuosa y no desperdiciarla.
Camina para hacer los recados por el barrio. Además de que el sedentarismo es una de las principales causas de la obesidad infantil, los coches son una de las principales causas de contaminación ambiental. Ir a comprar el pan o a las extraescolares caminando puede ser una buena forma no sólo de cuidar el medio ambiente, sino también de inculcar hábitos saludables en los niños.
Los papeles siempre a la papelera. Aunque es algo lógico y por eso existen las papeleras en las calles, desgraciadamente no es extraño encontrarnos papeles, latas, restos de comida y ahora con la pandemia, incluso mascarillas tirados en las aceras. Ocurre lo mismo en las playas y en el monte. Por eso, es importante que los niños comprendan que es clave para el planeta mantener limpio el entorno, tirar los papeles a la papelera y que si no hay una cerca, se lo guarden en los bolsillos. Y recuerda, la mejor forma de lograrlo es siendo un ejemplo para ellos.
Meriendas y medias mañanas respetuosas con el entorno. Se calcula que, a nivel mundial, entran en nuestros mares cerca de 12 millones de toneladas de desperdicios. Una forma de ayudar a cambiar esa tendencia es reduciendo el uso de los envoltorios desechables como el papel transparente o el de aluminio, que utilizamos para envolver los bocadillos de la media mañana o de la merienda. Prueba a sustituirlo por otras alternativas más respetuosas con el medio ambiente como bolsas portameriendas o portabocadillos reutilizables.