El partido político Contigo Somos Democracia urge "reformas fiscales en la Renta del 2020" para que se ajuste a la realidad de "un año catastrófico en la economía de las familias, negocios, pymes, turismo y un sinfín de servicios y actividades empresariales".
Mar Rodríguez, miembro de la ejecutiva nacional de CONTIGO señala que "las circunstancias excepcionales requieren leyes excepcionales" y lamenta "el pulso entre los políticos a costa de la pandemia en vez de trabajar en la misma línea guiada por directrices de los investigadores y sanitarios".
Por otro lado, CONTIGO advierte que sería inconcebible que el Gobierno, con tiempo y previsión, no empezara ya, a preparar medidas fiscales urgentes para que la próxima declaración de renta sea menos gravosa para aquellos sectores que han visto reducidos drásticamente sus ingresos y que, lamentablemente a corto plazo no recuperan "la nueva normalidad".
Entre las medidas sugeridas por CONTIGO, estaría que los trabajadores que han cobrado del ERTE no se vean abocados a hacer la renta, por el sólo supuesto de tener dos pagadores (empresa y SEPE). De ahí que debe estudiarse un marco legal para cuando uno de los pagadores sea el SEPE. De mantenerse la actual reglamentación, cada trabajador incluido en un ERTE y que cobre menos de 24000 euros brutos anual podría tener que abonar más de 1300 € en su renta.
Por otro lado, el gran número de alquileres de locales que no se están cobrando a causa de la falta de ingresos de los negocios, precisa cambios legislativos para no empeorar la crisis que afecta a los arrendadores de locales comerciales.
En este sentido, CONTIGO destaca la necesidad de modificar, excepcionalmente por la COVID-19, la regulación del impago de alquileres para que los propietarios estén exentos de declarar e ingresar el IVA ni imputar las rentas como ingresos en su IRPF por aquellas mensualidades no cobradas en un estado de permanentes confinamientos y emergencia social.
Actualmente la ley señala que el impago de las rentas no exime al propietario de sus obligaciones fiscales y abonar el 21% de IVA de presuntas rentas sin que el inquilino no las haya pagado y declarar en su renta unos ingresos que no ha tenido.