El escritor Rubén Castillo hablará del libro Rayuela, de Julio Cortázar, el martes 15 de marzo, a las 19.00 horas, en la Biblioteca Salvador García Aguilar (en Avenida del Chorrico, n° 44, de Molina de Segura), dentro del ciclo El canon de la BRMU. Presenta el acto Luis García Mondéjar.

Rubén Castillo (Blanca, 1966) es licenciado en Filología Hispánica, profesor de Lengua y Literatura y escritor. Ha publicado casi una veintena de libros, especialmente novelas y cuentos. Entre ellos destacan las novelas Los días humillados, 2016; Anillo de Moebius, 2014; El globo de Hitler, 2013; Galatea en las esferas, 2012; Las hogueras fosfóricas, 2011; Las grietas del infierno, 2002; La mujer de la mecedora, 1992; Reina María, 1990, y los volúmenes de relatos Hegel en el tranvía, 2008; Imágenes prohibidas de la Biblia y El verbo se hizo carne, ambos en 1997. En narrativa infantil se ha aventurado con La cueva de las profecías, 2010 y un libro de reseñas literarias Ventanas de papel: 50 lecturas didácticas para jóvenes también de 2010.

En poesía ha publicado Por un país desconocido, 2016. También ha realizado crítica literaria para los diarios La Verdad, El Faro de Murcia, El Noroeste y para varios blogs. En Librario íntimo, su blog literario, va colgando las reseñas de los libros que lee.

Fue presentador del programa radiofónico La torre de papel en Onda regional de Murcia y editor en 2003 del volumen de estudios El poso de la nada, obra literaria de José Luis Castillo Puche.

En 1989 fue galardonado con el Premio Gabriel Sijé de novela corta y en 1991 con el Premio Ateneo de Valladolid. Como escritor de cuentos ha sido ganador de otros premios, como el Ciudad de Mula en 2006 con Gil, en 2006 del Premio Internacional de Relato Corto Encarna León con Guillermina, del Premio José Calderón Escalada en 2007 con Cuento que usted debe escribir y en 2010 del Premio Gerald Brenan con La cinta transportadora.

RAYUELA

Publicada en 1963, es la segunda novela publicada por Cortázar. En ella se introducen numerosas innovaciones entre las que destaca multiplicidad de lecturas: de forma lineal como haríamos con cualquier otro libro o bien siguiendo el tablero de dirección propuesto por el autor, saltando de un fragmento a otro como si realmente estuviésemos jugando a la rayuela. Admite una tercera lectura que es la elegida por el lector. Esta multiplicidad por tanto, juega con la subjetividad de quien se recrea con la lectura de esta obra.

Originariamente la novela iba a titularse Mandala, en referencia a las representaciones simbólicas espirituales y rituales del cosmos hindú y budista, utilizado para encontrar la unidad del ser, que es lo que hace su protagonista, Horacio Olivera. En la rayuela el objetivo es alcanzar el noveno cuadro, el cielo.