Con estas palabras se refirió la Portavoz del PP de Los Alcázares, Cristina Sánchez, en referencia a las obras realizadas hace más de una década por el Ayuntamiento de Los Alcázares y las cuales están siendo un verdadero quebradero de cabeza para los técnicos municipales, debido a las numerosas instalaciones urbanas que se realizaron incumpliendo la normativa y que supondrá un incremento de 50.000 euros en la obra de mejoras que se están realizando en calles de Los Narejos.

El pasado 23 de agosto de 2017, el Ayuntamiento de Los Alcázares adjudicó a la mercantil “Trisacor, Infraestructuras y Servicios S.L” la obra para la accesibilidad y pavimentación en el Carril de las Palmeras, Avnda de Los Narejos y diversas calles de la U.A. n.º 5 de Los Alcázares, incluidas dentro del Plan de Actuación Regional de Dinamización de Obras y Servicios de Competencia Municipal (P.A.R.D.O.S). Una obra que se fijó inicialmente en 254.090,39 € y que deberá incrementarse debido a las deficientes obras realizadas hace algo más de 15 años por la empresa adjudicataria de turno.

Estas deficiencias en las instalaciones urbanas bajo tierra se concentran según los técnicos municipales en la zona situada en la U.A. 5, que comprende las manzanas delimitadas por las calles Río Aranguín-Río Navia, calles Río Caudal-Río Deva y calles Río Caudal-Río Güeña, estas últimas del ámbito de las mejoras.

Desde el gobierno municipal informan que, “una vez comenzados los trabajos previstos, ha surgido la necesidad de realizar obras complementarias que no figuraban en el proyecto ni en el contrato, y que cuya ejecución se hace necesaria para poder ejecutar la obra proyectada tal y como estaba descrita en el proyecto, siempre acorde a la normativa y no como permitió el gobierno socialista cuando gobernaba”.

Según el proyecto, consultado por los técnicos municipales antes del inicio de la obra, redactado por el Arquitecto, C.M.G., se puede apreciar que la previsión del proyecto para la profundidad a la que debía de discurrir la red de abastecimiento de agua potable, era de 1,20m, y la previsión a la que debía de discurrir la infraestructura de alumbrado público era de 0,50m. No llegando a ejecutarse de tal manera.

Por último, también se consultaron los proyectos de edificación de las parcelas afectadas, existiendo en dos de ellos, Proyecto de Infraestructura Común de Telecomunicaciones, detallándose que las instalaciones debían estar a mínimo 30 y 45 centimetros de profundidad, pudiéndose observar, que las infraestructuras ejecutadas, no se encuentran tampoco dentro de lo proyectado.

Una vez comenzaron los trabajos de demolición de pavimento por medios mecánicos, pudo apreciarse como las infraestructuras iban excesivamente superficiales, enredadas en las raíces de los árboles, y adheridas al hormigón de la solera base de la acera, así como al mortero de agarre de las propias baldosas de la acera, provocando  numerosos daños a las infraestructuras inevitables, a pesar de que se reforzaron las demoliciones por medios manuales, para intentar evitarlas o paliarlas. 

Desde el equipo de gobierno del Partido Popular, se comunicó la necesidad de llevar las infraestructuras aparecidas a la profundidad a la que debieran estar, y ejecutarlas con arreglo a la normativa correspondiente, para poder continuar con el arreglo de pavimentación y accesibilidad que todos los vecinos merecen.

Por su parte, el concejal de Urbanismo, Francisco Montesinos lamentó el retraso que conllevará el arreglo de la infraestructura conforme a la normativa, señalando que “cuando las cosas no se hacen bien el que sale perjudicado es el ciudadano” y finalizando “lograremos llevar a cabo una obra dentro de la normativa que dure el máximo de tiempo posible y que el vecino no se vuelva a ver afectado nunca más”.