El Ayuntamiento de Lorquí, a través de la Concejalía de Deportes, ha informado que este año las piscinas municipales no se abrirán al público debido a la crisis sanitaria que se está viviendo a causa de la COVID-19. Esta decisión ha sido tomada con el fin de salvaguardar la seguridad y salud de los vecinos y visitantes que acudan a las instalaciones.
La determinación del cierre de las instalaciones se adopta ante la dificultad de cumplir las medidas de seguridad como el distanciamiento, las exigencias de desinfección y la limitación del aforo en el recinto y las propias piscinas. "Esta decisión se toma por cautela, hay que tener en cuenta que se trata de una zona pública donde se congregan decenas de personas y por lo tanto son lugares susceptibles de contagio y propagación del virus" ha destacado el alcalde del municipio, Joaquín Hernández.
Otros municipios de la Región se han visto obligados a tomar la misma decisión y es que, los rebrotes cada vez son más comunes. Desde que se levantó el Estado de Alarma se han podido ver varias recaídas en determinados territorios, y es que el virus todavía no se ha extinguido. Por ello, es de vital importancia velar por la seguridad de la ciudadanía y apelar a la responsabilidad individual de todos los ciudadanos para poder avanzar en esta realidad y evitar contagios masivos.