Tras vivir en la noche del pasado Viernes Santo el momento álgido de su Semana Santa con el popular “Santo Desenclavamiento”, una antigua tradición que se remonta a 1700, Lorquí ha cerrado en la mañana de hoy Domingo de Resurrección los actos festivos con una jornada cargada de actos. Así, a primera hora se ha celebrado la Misa del Alba de la Resurrección, aperitivo del encuentro glorioso de hermandades locales y de la procesión del Resucitado. Una explosión de color, alegría y júbilo por la resurrección de Cristo, cuyo desfile ha recorrido las atestadas calles de la localidad ilorcitana.
Y para concluir estos días de tradición y devoción religiosa, a mediodía se ha oficiado en la Iglesia de Santiago Apóstol la misa Mayor de la Resurrección, último acto de la Semana Santa ilorcitana.