La iniciativa del líder del PP lorquino logra, además, que el Consistorio Municipal reclame la presentación de un plan de obras en los próximos 3 meses, con un cronograma de plazos que haga compatible los servicios ferroviarios con las obras.
El líder del PP lorquino ha afirmado que "no existe nada que justifique el cierre de la línea porque los primeros trabajos sobre las vías no se iniciarán hasta dentro de 9 meses".
El Ayuntamiento de Lorca, gracias a la propuesta encabezada por Fulgencio Gil en el Pleno celebrado esta mañana, ha instado al Gobierno de España a la suspensión del corte de la línea de cercanías Murcia con Lorca y Águilas el 1 de octubre, así como a la presentación de un plan de obras en los próximos 3 meses, con un cronograma de plazos que haga compatible los servicios ferroviarios con las obras.
Fulgencio Gil ha subrayado que tenemos que conseguir que la línea entre Águilas, Lorca y Murcia se mantenga abierta. Los planes del gobierno central son una condena, una injusticia y se han diseñado de la forma más dañina posible. Estamos hablando de una reivindicación que recoge el clamor generalizado tanto de los lorquinos, como de los ciudadanos de todos los municipios comunicados por esta línea.
Es inaceptable que el gobierno central se empeñe en cortar el servicio el 1 de octubre, porque no hay nada que justifique el cierre de esta línea de ferrocarril, absolutamente nada, ya que podríamos salvar la práctica totalidad del curso académico, un tiempo que tienen que aprovechar para corregir este caos y compatibilizar el mantenimiento del servicio con las obras, que era lo que estaba previsto desde el primer momento.
La iniciativa, recogida en una moción que ha obtenido el respaldo unánime de todos los grupos políticos, insta a mantener en funcionamiento la línea mientras las obras del tramo TOTANA-LORCA o LORCA PULPI lo permitan, valorando la utilización de las estaciones de la Hoya, San Diego o Sutullena en función del grado de ejecución de las obras. Teniendo en cuenta el grado de ejecución del soterramiento entre Barriomar y Nonduermas se puede utilizar esta última estación para salida y llegada de trenes.
Los ciudadanos de la Región de Murcia siguen sin conexión de alta velocidad debiendo desplazarse a Albacete o Elche para poder coger un AVE y eso a pesar de que la alta velocidad ya debería haber llegado a Murcia por una vía provisional mientras se ejecutaba el soterramiento tal y cómo el Partido Popular diseñó.
Es por todos sabido que un sistema de infraestructuras moderno, eficiente y eficaz es vital para lograr una recuperación económica rápida y sólida, así como una región más competitiva. Y si hablamos de infraestructuras de transporte, debemos hablar de AVE y de Cercanías, puesto que son las infraestructuras de transporte de personas y mercancías más eficientes y sostenibles. Los lorquinos se encuentran en una situación de clara discriminación con respecto al resto de españoles, ya que los trenes de Cercanías de la Región son los más viejos y los más caros de España, según los estudios publicados.
Desde el Partido Popular se proyectó y planificó la solución técnica que permitía la mejora y renovación de los trenes de Cercanías que circulan por la Región de Murcia, mediante la electrificación de las vías y la llegada de la alta velocidad. Estas obras compatibilizaban los trabajos con el mantenimiento de los servicios de Cercanías y con la llegada de la AVE de la Región, en el marco del desarrollo del Corredor Mediterráneo.
Hace unas semanas conocíamos a través de los medios de comunicación, la interrupción total de los servicios de Cercanías a lo largo de los más de 120 kilómetros que unen las estaciones de Murcia el Carmen y Águilas, que une los municipios de Murcia, Alcantarilla, Librilla, Alhama de Murcia, Totana, Lorca, Puerto Lumbreras, Pulpí y Águilas.
Tras varias semanas de desmentidos por parte de los dirigentes y representantes del Gobierno de Pedro Sánchez en la Región, concretamente del delegado del Gobierno, José Vélez, el lunes 30 de agosto, la presidenta de ADIF, María Luis Domínguez, que confirmaron oficialmente al Gobierno de la Región y a los alcaldes de los municipios afectados, los planes reales del Gobierno de España, que pasan por convertirnos en una isla ferroviaria.
La decisión del Gobierno de la nación supone el cierre inmediato de la línea de cercanías Murcia-Águilas a partir del próximo 1 de octubre y durante más de 3 años y medio. Debemos recordar que la línea de Cercanías entre Murcia y Águilas mueve a 1,2 millones de pasajeros al año, que se trasladarán a la carretera si el Gobierno de Pedro Sánchez continua adelante con la eliminación del servicio de trenes durante los más de tres años, según los datos de ADIF, a lo que se sumarán las más de 300 toneladas de mercancías que igualmente contribuirán a saturar nuestras carreteras.
En principio la decisión del corte ferroviario está basada en la ubicación de fondos europeos, los denominados de Reconstrucción y Resiliencia, que limita la ejecución de las obras hasta el 2026. Dichos fondos solo se pueden utilizar en proyectos adjudicados después de febrero de 2020. Por tanto, los tramos de obras adjudicados entre Murcia y Lorca salvo la variante de Totana se adjudicaron con anterioridad a esa fecha, concretamente en el año 2019 (2ª fase del soterramiento, Nonduermas-Sangonera la Seca, Sangonera-Totana y Totana-Lorca), y están acogidos a fondos FEDER con vigencia hasta el año 2027.
Según los estudios de RENFE, cuando se impide a los usuarios de cercanías hacer uso de ellas, estos eligen, mayoritariamente, el uso de vehículo privado, lo que supone más contaminación ambiental, más congestión en las vías interurbanas y por lo tanto un aumento del número de siniestros que no estamos dispuestos a asumir desde el Partido Popular.
CCOO y los propios comités de empresa de Renfe y Adif, califican esta interrupción del servicio como un "mazazo tremendo" y una "catástrofe" para los viajeros y empleados por las razones citadas, solicitando la compatibilidad entre las obras y la prestación de los servicios actuales de cercanías a lo que nos sumamos desde el Partido Popular recordando que las obras fueron proyectadas manteniendo operativos los servicios.
Lejos de mantener el diseño del Partido Popular que garantizaba la llegada de la alta velocidad mientras se desarrollaban las obras de soterramiento, los cambios introducidos por el gobierno de Pedro Sánchez han implicado un incremento de costes, además de los retrasos de más de dos años en la llegada del AVE y la mejora de los trenes de Cercanías, hechos que se acumulan en contra de los murcianos y del crecimiento económico de la Región de Murcia.
El Grupo Popular solicitó en la Mesa del Ferrocarril, información del corte del cercanías, plazos e impacto socioeconómico en Lorca y su comarca, que a día de hoy seguimos sin conocer, y lo que es más grave, que nos tengamos que enterar por boca del delegado del Gobierno de la respuesta negativa de Adif a la carta que se envió en la última Mesa del Ferrocarril celebrada en Lorca.
Todo lo anteriormente expuesto no es solo es el pensamiento o criterio del Partido Popular, es el sentir mayoritario de colectivos sociales, económicos, sindicales y de la Plataforma en Defensa del Ferrocarril de la Región de Murcia, por lo que nos vemos obligados a recoger sus inquietudes y plasmarlas en los acuerdos de la moción.