• Los caminos de acceso están impracticables, no han sido acondicionados, y para llegar a las calas los ciudadanos tienen que arriesgarse a sufrir desperfectos en sus vehículos. No se han instalado los lavapiés, ni los puestos de vigilancia, ni pasarelas peatonales, ni se ha implementado el servicio extraordinario de limpieza.
Los vecinos y usuarios de las playas de Lorca han denunciado que comienzan su temporada de verano sin haber sido objeto de ninguna actuación de mejora ni mantenimiento por parte del gobierno de Diego José Mateos, y sin ni siquiera haber instalado el mobiliario de salvamento, socorrismo, lavapiés y tarimas de acceso. Ya el año pasado se les hizo muy tarde para ejecutar estas tareas, y usaron como excusa barata que no sabían si a causa de la pandemia podría abrirse las playas. Este año ya no tiene excusa, ni siquiera una torpe explicación como la del año pasado, y los caminos están casi impracticables porque no se ha realizado ninguna de las tareas que habitualmente se ejecutaban para acondicionar los accesos a las calas de nuestro litoral.
La concejal de Participación Ciudadana en el Ayuntamiento de Lorca por el Partido Popular, Mari Huertas García, ha informado que a este hecho se le suma que tampoco se ha activado aún el dispositivo extraordinario de limpieza que se pone marcha por parte del Ayuntamiento coincidiendo con la llegada del verano.
Hemos de recordar que con el PP en el gobierno de Lorca, este dispositivo se activaba el 15 de mayo y concluía el 15 de septiembre. Sin embargo en cuanto el PSOE ha llegado, han llegado también los recortes. De esta forma los vecinos de las playas y sus usuarios se encuentran con que los impuestos son más caros pero los servicios son cada vez peores. Lorca es la única ciudad de la Región de Murcia con playas que a día de hoy no cuenta con ningún dispositivo en este sentido ni tampoco ha acondicionado los accesos a sus playas. Es evidente que con el PSOE Lorca pierde.
Desde el Partido Popular exigimos que se ponga inmediatamente en marcha el dispositivo extraordinario de limpieza y se proceda cuanto antes al acondicionamiento de los caminos, porqueya están llegando tarde otra vez. Estamos sufriendo un gobierno local acabado y agotado, que nos está haciendo perder oportunidades y está empeorando gradualmente el estado que presenta nuestro término municipal.
Tampoco se ha instalado el mobiliario quecada verano se ubica en nuestras playas, como las torres de vigilancia, los lavapiés o las tarimas de madera en la playa. El acondicionamiento de los caminos es una medida prioritaria puesto que a día de hoy acceder a calas como la de "El Baño de las Señoritas o la de El Siscar supone un riesgo para todo aquel que quiera acceder a las mismas con su vehículo. Los caminos están plagados de baches, desperfectos y desniveles, es algo que tenía que haberse corregido antes de iniciar la temporada de verano, como se hacía cuando gobernaba este municipio el Partido Popular.
Por culpa de la inoperancia del Sr. Mateos y su gobierno acabado y agotado, las personas que nos visiten para disfrutar de nuestras playas se van a llevar una pésima imagen. Todos estas cuestiones tendrían que cuidarse con mucho más detalle para conseguir que los turistas que acudan a Lorca se lleven un buen recuerdo de nuestro municipio, en vez de una imagen de dejadez como la que actualmente han provocado los socialistas en Puntas de Calnegre.
El Partido Popular consiguió años atrás mientras gobernaba el Ayuntamiento el hito histórico de la concesión de una bandera azul a la cala de Calnegre algo que ocurría por primera vez, y eso conlleva la obligación de cuidar más aún si cabe nuestras playas, y no dejar pasar el tiempo hasta plantarse casi en el mes de julio para realizar el mantenimiento que tenía que estar hecho desde el pasado mes de mayo.
A medida que pasan los meses el gobierno de Mateos empeora el estado de nuestro municipio, pero sube los impuestos, las tasas municipales, arruina Limusa con una deuda de 1,2 millones de euros en apenas un año y se gasta 800.000 € en comprar coches. Sin embargo mientras se despilfarra el dinero, la ciudad empeora.