A través del taller de restauración de la Concejalía de Desarrollo Local se ha llevado a cabo un proceso de restauración de esta pieza única del barroco lorquino de grandes dimensiones y cercana a la media tonelada de peso.
El alcalde de Lorca, Diego José Mateos, junto a las concejalas de Desarrollo Local y Cultura del Ayuntamiento de Lorca, Isabel Casalduero y María Ángeles Mazuecos, han asistido a la recolocación del gran espejo barroco del Palacio de Guevara tras la culminación del proceso de restauración.
Mateos ha anunciado "el retorno del gran espejo barroco de madera tallada y dorada del Palacio de Guevara, un tesoro patrimonial de nuestro municipio que tras su restauración vuelve a su casa, al lugar que ocupaba antes de los terremotos de 2011, el conocido como 'Salón Amarillo' del Palacio".
"A través del taller de restauración de la Concejalía de Desarrollo Local, de la intervención de dos maestros de la restauración y la carpintería como son Antonio García Rico y Manuel Mateo, respectivamente que han realizado un magnífico trabajo poniendo todo el esmero y dedicación para completar un necesario y complejo proceso de restauración de la pieza que comenzaba el pasado mes de marzo y que ha quedado espléndidamente restaurada".
El Primer edil ha explicado que "para su restauración se han invertido cerca de 2.500 horas de trabajo del equipo interdisciplinar interviniente y se han empleado unas 1.750 hojas de pan de oro de ley de 22 quilates en un espejo considerado una pieza única datada entre los años 1702 y 1704 y de autoría desconocida, tiene unas dimensiones de 3,44 de alto por 2,33 metros y su peso se aproxima a los 400 kilos".
"El marco fue tallado sobre una estructura de tablones y piezas de madera ensambladas, en las que, con el paso del tiempo, se han ido produciendo tensiones, movimientos, desajustes y deformaciones que han causado grandes grietas que ponían en grave peligro la integridad estructural y formal de la pieza. A ello se añadirían golpes, perdidas de volúmenes tallados, repintes puntuales, desprendimientos de dorados o aparejos por humedad, por lo que iniciamos la restauración de la pieza para lograr su recuperación y mejorar su conservación".
Mateos Molina ha detallado que "en la actuación de su restauración ha primado la conservación de sus características físicas, estéticas, históricas y culturales originales, con respeto absoluto a la obra original, mediante un orden secuencial de la actuación que ha comprendido tareas de limpieza, ajustado de piezas desprendidas, refuerzo estructural, reintegración de volúmenes desaparecidos tallados en madera, reintegración de lagunas de aparejos, limpieza repintes, limpieza de los dorados, reintegración discernible de dorados o el barnizado final de protección".
"Desde nuestra llegada al Ayuntamiento de Lorca, este equipo de Gobierno ha recuperado el interés por la conservación del patrimonio municipal y, por ello, pusimos en marcha los trabajos de restauración de una pieza única como es este gran espejo barroco perteneciente a un monumento como es el Palacio de Guevara".
El alcalde de Lorca ha indicado que "estamos hablando de un bien que resulta fundamental para el patrimonio artístico mueble del barroco lorquino por su riqueza y particularidad considerada como una obra singular y única en nuestro contexto cultural dentro de este periodo artístico".
Diego José Mateos ha puesto de manifiesto que "se trata de un espejo convertido en un bien de prestigio y referente singular de un momento artístico, social y cultural de la Lorca de finales del S. XVII y principios del s. XVIII pues su originalidad se debe a su espléndido marco de estructura rectangular y disposición de volúmenes simétricos, que ofrece un rico repertorio ornamental con formas talladas de gran plasticidad y carnosidad, compuesto con motivos de cintas en combinación de elementos vegetales, todo alarde de formas es dispuesto para exaltar el blasón de la familia Guevara, a lo que hay que sumar figuras como el águila bicéfala o las cabezas de león y los niños".