• El Barrio de San Cristóbal, Apolonia, Fuerzas Armadas, Los Ángeles, La Viña, Avenida de Europa, Lope Gisbert, así como parques, plazas y diferentes enclaves del casco histórico serán dotados de este recurso, clave contra el vandalismo y para la respuesta policial ágil.
El Alcalde de Lorca, Fulgencio Gil, ha anticipado hoy que ya está en marcha la petición para instalar en nuestro municipio una nueva batería de 150 cámaras de videovigilancia exclusivamente para seguridad ciudadana, que se sumarán a las que ya se han ubicado en Avenida Juan Carlos con Óvalo de Santa Paula, Alameda de la Constitución, calle Musso Valiente, calle Fajardo El Bravo y Avenida de Santa Clara. La ubicación está especialmente diseñada por parte de la Policía Local para su protección frente a los actos vandálicos.
La primera de las zonas para la que se va a solicitar la autorización para instalar será la calle Mayor del Barrio de San Cristóbal, así como Lope Gisbert, Avenida de Europa, Fuerzas Armadas, Los Ángeles, La Viña y Alameda de Cervantes, junto a diferentes enclaves del casco histórico, parques, plazas y zonas verdes. De esta forma queremos que Lorca siga siendo uno de los municipios más seguros de España, como así lo ha constatado un estudio independiente que conocíamos hace unos días.
Fulgencio Gil ha explicado que desde que informamos de que íbamos a poner en marcha esta nueva herramienta, una de las más prácticas en la lucha contra el vandalismo como se ha contrastado en diferentes ciudades, han sido múltiples los colectivos ciudadanos y asociaciones de todo tipo que nos han trasladado la idoneidad de incrementar su instalación a otros emplazamientos. Estamos hablando de un recurso que ofrece una acentuada utilidad a la hora de identificar a los autores de actos vandálicos, con un marcado efecto disuasorio, especialmente valioso en su perfil de prevención de este tipo de incidencias. Sirve, además, para que nuestra Policía Local disponga de una información directa y en tiempo real de cualquier eventualidad que pueda surgir, por lo que permite ofrecer una respuesta más rápida y efectiva para asistir a los ciudadanos.
Vamos a dotar a los lorquinos de un recurso de incontestable utilidad, cuyo carácter práctico ha sido contrastado en múltiples casos en los que se ha requerido la intervención de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado. El objetivo que persigue la instalación de estas cámaras es asegurar la protección de los edificios e instalaciones públicas y de sus accesos, constatar infracciones a la seguridad ciudadana y prevenir daños a las personas y bienes.
Botón de Seguridad para comerciantes, hosteleros y mujeres deportistas.
Otra de las novedades que se ha previsto poner en marcha será dotar al colectivo de comerciantes y hosteleros, así como a los grupos de mujeres que suelen realizar deporte por nuestro municipio, de un Botón de Seguridad. Se trata de un mecanismo de apariencia similar al conocido sistema de teleasistencia, gracias al cual las personas de estos colectivos que así lo soliciten dispondrán de un dispositivo de pequeño tamaño, dotado de un pulsador con comunicación directa con la Policía Local para advertir de cualquier incidencia. Estamos hablando de un avisador de bolsillo, de tamaño similar, por ejemplo, al mando de un garaje, que traslada a los servicios policiales la ubicación exacta de la persona. Al contar con un código individualizado, la Policía también sabrá la identidad de quien realiza el aviso, posibilitando una reacción inmediata.
Esta iniciativa será pionera en Lorca y vamos a implantarla tras haber comprobado el buen resultado que está ofreciendo en otras ciudades de nuestro país que han apostado por su desarrollo y puesta a disposición de entidades ciudadanas. En esta línea y ante la imposibilidad material y económica de que cuente con carácter universal, hemos supervisado la experiencia de otros municipios para emprender su implantación gradual.
En el caso de hosteleros y comerciantes, se ha elegido a estos profesionales por cerrar sus negocios, en muchas ocasiones, en horario tardío, mientras que el caso de los grupos de mujeres que practican deporte en espacios abiertos, todos somos conscientes de los casos que ha habido que lamentar en otros enclaves de España, y que aquí no queremos que se produzcan. En cualquier caso, esta herramienta se podría ampliar a otros colectivos.