El portavoz de IU-Lorca defenderá mañana en el Pleno una moción de reprobación contra el edil de Ciudadanos que tiene por objeto que la Corporación Municipal desapruebe formalmente sus continuos ataques sin fundamento a empleados públicos y también a compañeros de la Corporación municipal

El portavoz de Izquierda Unida-Verdes en el Ayuntamiento de Lorca, Pedro Sosa, ha confirmado la presentación por parte de su grupo municipal de una moción de reprobación al concejal de Ciudadanos, Antonio Meca, al Pleno que se celebrará mañana.

Sosa ha explicado que la iniciativa tiene por objeto que la Corporación Municipal desapruebe formalmente los continuos ataques sin fundamento de Meca a empleados públicos y también a compañeros de la Corporación municipal. “Los funcionarios y trabajadores de las empresas municipales tienen derecho a que se respete su dignidad en el trabajo y a no ser acosados ni moral, ni laboralmente”, dijo Sosa quien exigió que “se ponga coto de inmediato” a estas actuaciones.

El portavoz de IU censuró la “presión” y la “persecución” de Meca hacia varios funcionarios, lo que está generando situaciones de estrés emocional hasta el punto de  verles llorar por los pasillos o solicitar bajas laborales “porque no pueden más”.

Sosa apuntó que en estas cuatro décadas de democracia municipal jamás se había conocido en Lorca un ataque tan evidente, injustificado y público a determinados funcionarios del Ayuntamiento, “a veces hasta con la pretensión de impugnar la independencia, profesionalidad y lealtad institucional de servicios públicos enteros de este Ayuntamiento”.

El portavoz de IU explicó que, por ejemplo, Meca está impidiendo la promoción profesional de algunos trabajadores del Ayuntamiento simplemente por animadversión personal, o ha llegado a denunciar con publicidad a otros en causas que después han sido archivadas. Para Sosa lo más grave es la indefensión a la que están sometidos estos trabajadores. “Ellos no tienen la posibilidad de tener un micrófono delante para responder a los ataques de Meca y se ven obligados a sufrir, en silencio, las consecuencias que este abuso de poder supone para ellos y para sus familias”, aseguró. Los procedimientos de Meca, llegan al punto de entrar en viviendas privadas para “jugar a los espías” y, saltándose sus deberes de confidencialidad y reserva, hacer acusaciones totalmente carentes de fundamento.

Sosa explicó que, como la justicia no le da la razón, Meca se dedica ahora a difamar,  calumniar e insultar en las redes sociales, “que le sale gratis”. Sólo contra Izquierda Unida, el concejal de Ciudadanos ha realizado hasta 13 ataques públicos en menos de una semana, a veces de madrugada, lo que indica su “obsesión por hacer daño”.

Todo ello ha llevado a Pedro Sosa a tener que enseñar en una rueda de prensa la nómina de la empresa para la que trabaja para demostrar que lo hace “a media jornada” en contra de lo que Meca asegura públicamente. O a mostrar el informe de la auditora de LIMUSA que desmiente que exista incompatibilidad, conflicto de intereses o incumplimiento de su código ético por el hecho de que su madre tenga un bajo alquilado a esta empresa desde antes incluso de que él fuera miembro de su consejo de administración en calidad de concejal. “Todo lo que ha dicho es falso y puede desmontarse documentalmente, pero el daño que ha hecho a mi entorno ya es irreversible”, se lamentó.

Sobre la “querella criminal” contra IU Lorca por “injurias y calumnias” que Meca ha interpuesto esta mañana, Sosa ha manifestado estar “muy tranquilo” porque toda la información a la que ha aludido su formación para defenderse de los furibundos ataques del concejal de Ciudadanos “son públicos y pueden ser consultados por cualquier ciudadano en internet”. En cambio las irresponsables y frenéticas acusaciones de corrupción sí son querellables, por lo que los servicios jurídicos de IU ya estudian qué respuesta dar a las manifestaciones vertidas hoy por Meca.

Por último, Sosa lamentó que los lorquinos tengan que asistir a este espectáculo lamentable, porque “lo que esperan de nosotros es que trabajemos para solucionar los problemas del municipio, y no que convirtamos la política en un triste y bochornoso vodevil”. “Pedimos disculpas a nuestros vecinos pero estamos seguros de que entienden que ejerzamos nuestro derecho a defender nuestro honor”. En ese sentido, Pedro Sosa recordó que la trayectoria de IU en el municipio de Lorca es “intachable” y que todos y cada uno de sus concejales se han caracterizado por su “honestidad, integridad y dedicación a Lorca” por lo que “no vamos a tolerar que nadie ensucie nuestro buen nombre ni un solo minuto más”. 

MOTIVACIÓN DE LA URGENCIA DE LA MOCIÓN

No es habitual que un pleno ordinario mensual, como este correspondiente al mes de febrero, se esté celebrando cuando ya hemos entrado en el mes de marzo. Los motivos que están detrás de este aplazamiento son los mismos que fundamentan la urgencia de esta moción. Se ha pretendido hacer responsable a un funcionario de este Ayuntamiento, en la última escala de los grupos de clasificación (cuerpo de subalternos) de este cambio de fechas, empañando su profesionalidad y dignidad, cuando de todos es sabido la dificultad que implica realizar en un medio día un número muy importante de notificaciones. Este suceso, posterior a la Junta de Portavoces en la que se ordenó inicialmente el debate del Pleno ordinario del mes de febrero, es la gota que colma un vaso ya muy lleno de actuaciones reprobables del concejal de Ciudadanos hacia trabajadores públicos y compañeros de Corporación.

El ataque injustificado y público a funcionarios por parte de Antonio Meca García, concejal del Grupo Municipal Ciudadanos en el Ayuntamiento de Lorca, nos obliga a defender la independencia, profesionalidad y lealtad institucional que preside la actuación de los empleados públicos para poner coto, de manera inmediata, a este proceder.

Por otra parte, la interposición de una “querella criminal” anunciada en el día de ayer, con publicidad en las redes sociales, por parte de este concejal contra Izquierda Unida-Verdes de Lorca, nos obliga a sus representantes en esta institución a cuantas acciones sean necesarias, incluida la presentación y defensa de esta moción, para que, ni durante un minuto más, se ponga en entredicho el buen nombre de nuestra formación política que, durante décadas, se ha caracterizado por su trabajo abnegado en pro del pueblo de Lorca. 

MOCIÓN DE URGENCIA SOBRE REPROBACIÓN DEL CONCEJAL DE CIUDADANOS

Desde la celebración en 1979 de las primeras elecciones municipales del período democrático hasta la actualidad, y contando con la presente que concluirá en pocos meses, han sido diez las corporaciones locales configuradas por el voto de los lorquinos que ya forman parte de nuestra historia democrática como pueblo. En estos cuarenta años de democracia municipal el Ayuntamiento de Lorca ha sido gobernado casi siempre por mayorías absolutas, y salvo en las primeras corporaciones en las que encontramos representación de grupos centristas y de independientes, el resto, casi siempre, sólo ha conocido la existencia de tres grupos municipales: PSOE, PP e IU.  Hace 4 años se produce en España un cambio evidente de su “sistema de partidos” y nuevas formaciones, distintas a las tradicionales, comienzan a entrar en las instituciones. Así, en Lorca, se configura por primera vez en mucho tiempo un pleno municipal de cuatro grupos políticos que presenta como novedad la entrada del partido Ciudadanos.

En ese dilatado tiempo que va de 1979 a 2019 la política local, dentro y fuera del Pleno, ha conocido debates intensos en torno a los asuntos más variados, debates que en muchos casos aún siguen en la agenda política: modelos urbanísticos, distintas visiones de la ordenación del territorio, agua y política, actuaciones en torno al corazón histórico, política hacía barrios y pedanías, fiscalidad y presupuestos, modos de gestión de los servicios públicos, reivindicaciones locales a otras administraciones en materias de vital importancia para nuestros ciudadanos como la educación y la sanidad, etc.

Además de las reglas que todos conocemos y que vienen expresadas en leyes y reglamentos, a lo largo de estos cuarenta años de historia, y así se puede constatar en hemerotecas y actas de las sesiones, esos debates también se han ordenado conforme a “leyes no escritas”, a normas que, por su evidencia, no hace falta plasmar en ningún boletín.

La primera es que los funcionarios que asisten al gobierno local y a los grupos políticos y que implementan las decisiones que aquí se toman no deben formar parte de los lances políticos entre los grupos. No hacía falta que ningún Estatuto funcionarial lo dijese, pero los funcionarios y trabajadores públicos de este Ayuntamiento tienen derecho a que se respete su dignidad en el trabajo y a no ser acosados ni moral, ni laboralmente, al igual que también tienen derecho a la progresión en la carrera profesional.

En estas cuatro décadas de democracia municipal jamás se había conocido en Lorca, hasta la fecha, un ataque tan evidente, injustificado y público a determinados funcionarios de este Ayuntamiento, a veces hasta con la pretensión de impugnar la independencia, profesionalidad y lealtad institucional de servicios públicos enteros de este Ayuntamiento. Y de esas invectivas, que las más de las veces sólo encuentran cauce de expresión en redes sociales propias utilizando la insinuación burda y la insidia, han sido objeto funcionarios de todo tipo y condición, de grupos y niveles diversos, desde un notificador sobre el que descargar la responsabilidad del cambio de la convocatoria de un Pleno (la celebración de esta sesión hoy en lugar de haberla celebrado el pasado miércoles, como estaba previsto, es prueba de ello), hasta funcionarios de habilitación nacional a los que el ordenamiento jurídico local reconoce el derecho a la acumulación y sobre los que se siembra todo tipo de dudas con amplio ruido mediático, para que después las instituciones llamadas a resolver las mismas acaben archivando las denuncias formuladas contra ellos, pasando por funcionarios de cultura ejemplares, que han dejado una huella cultural histórica en nuestra ciudad que nadie podrá borrar, y a los que se ha pretendido cortar su derecho a la promoción funcionarial.

Pero además de los episodios expresados contra trabajadores locales, en esta última corporación municipal también se ha roto otra regla no escrita que tiene esta vez como objetivo de los dardos políticos a compañeros de corporación municipal, y, lo que es peor, a sus familiares. Todos sabemos que cuando adoptamos la decisión de dedicarnos a la política estamos expuestos a recibir críticas. Nuestro derecho al honor es, así lo dice la doctrina que aborda estos asuntos, mucho más limitado que el de los ciudadanos privados porque tenemos mayor acceso a medios de defensa, pero eso no puede legitimar en modo alguno la pretensión de destruir personalmente al oponente político, con insinuaciones insidiosas, con afirmaciones inciertas y difamatorias y con publicación de noticias inveraces, y además en algún caso traspasando ámbitos de privacidad que jamás se habían traspasado y que afectan a nuestras familias. Eso es lo que ha sucedido ya en varias ocasiones en la actual corporación municipal, y ese ha sido el objeto del último episodio del ataque personal del concejal de Ciudadanos sobre el Portavoz de Izquierda Unida-Verdes.

En esta ocasión se ha forzado hasta el límite, cuando no traspasado, el derecho de acceso a la información que tienen los concejales, hasta el punto de llegar a entrar en viviendas privadas, y saltándose sus deberes de confidencialidad y reserva, y torciendo la verdad en muchos aspectos, se ha pretendido proyectar una insinuación pública falsa, desmentida además por la propia empresa en sus informes y que va en desmérito del mayor patrimonio que acumulan muchas personas y que no es otro que su honra y su decencia.

En función de todo lo expresado, del Pleno solicito la aprobación del siguiente ACUERDO:

1.- Reprobar las actuaciones y declaraciones del concejal de Ciudadanos con relación a los funcionarios y al Portavoz municipal citados en el cuerpo de la moción.