La concejala de Izquierda Unida-Verdes en Lorca, Gloria Martín, ha denunciado la inundación de varios tramos de la RM-621, conocida como la antigua carretera de Águilas, tras las lluvias que se produjeron ayer por la tarde y que dejaron 24 l/m2 en el municipio.
La anegación de esta vía, que Martín comprobó personalmente, causó dificultades en el tráfico rodado hasta el punto de que algunos vehículos tuvieron que desplazarse por el carril bici anexo, especialmente en las intersecciones con el carril del Vela y con el camino de los Ibarra.
La concejala de IU-Verdes recordó que precisamente este tramo fue remodelado en 2015 con una inversión de tres millones de euros y que, durante su inauguración, el entonces consejero de Fomento, Francisco Bernabé (PP), aseguró que la antigua carretera de Lorca a Águilas se convertía así en "la mejor de la Región de Murcia".
"Los hechos demuestran que se trató de una chapuza más para lavar la cara a una carretera que sigue teniendo los mismos problemas de siempre cuando llueve", se lamentó Martín.
La edil de IU-Verdes recordó que hace sólo unos días, el portavoz de su grupo municipal, Pedro Sosa, criticó la pasividad de las Administraciones para evitar inundaciones y avenidas y exigió que, entre otras, se ejecuten las obras de ampliación de los viaductos de desagüe sobre la rambla de Biznaga de las carreteras RM-11 (autovía Lorca-Águilas) y RM-621, que se encuentra ya proyectada y adjudicada.
En La Escucha y Pozo Higuera "con el miedo en el cuerpo"
Martín aseguró que la huerta de Lorca sigue siendo "muy vulnerable" a las riadas cuando están a punto de cumplirse seis años de la que el 28 de septiembre de 2012 anegó centenares de hectáreas de tierras de labor y decenas de granjas, causando dos muertos en el municipio y más de cien millones de euros en pérdidas. En ese sentido, explicó que vecinos de Pozo Higuera, La Campana y La Escucha vivieron ayer "momentos de mucho nerviosismo" ante la previsible crecida de las ramblas. "Es injusto que los vecinos vivan con el miedo en el cuerpo por la falta de inversiones públicas para evitar avenidas y también por la irresponsabilidad del Ayuntamiento, que concede licencias de obras para construcciones que alteran el paso natural del agua". Martín aludía así a un macrocebadero de 2.000 cabezas levantado en zona inundable y para el que el Consistorio no solicitó los informes pertinentes a la Confederación Hidrográfica del Segura (CHS), lo que mantiene en vilo a los vecinos del paraje de La Piscina.
La edil de IU-Verdes calificó de "temeridad" la actuación municipal por el riesgo que comporta desde el punto de vista de una posible inundación. Y es que la propia CHS asegura que, según la información que se desprende de la cartografía de zonas inundables "en la zona en cuestión se alcanzan calados de hasta 0,40 metros y velocidades cercanas a un metro por segundo para el periodo de retorno de 500 años".
