En el pleno ordinario celebrado el 28 de septiembre de 2015, ante una moción presentada por este partido, el Ayuntamiento aprobó por unanimidad el solicitar de forma inmediata a la Dirección General del Catastro la aplicación de los coeficientes de reducción de los valores catastrales en el ámbito del municipio, dentro de los plazos que establece la legislación vigente, teniendo en cuenta el valor de mercado actual.

Antonio Meca: "El Edil de Hacienda el 2 de junio del presente año informó que el Alcalde de Lorca, Francisco Jódar, remitió a la Dirección General de Catastro en Murcia la solicitud formal para que se establezca y aplique una reducción de los valores catastrales en el IBI urbano, una importante ventaja fiscal que beneficiaría de forma directa a los ciudadanos correspondientes a 67.812 recibos".

Asimismo, se acordó en el mismo pleno por unanimidad que en la revisión de las Ordenanzas Fiscales para 2016 se estudiara una reducción transitoria del tipo impositivo del Impuesto de Bienes Inmuebles, hasta la efectiva revisión del valor catastral de los inmuebles, por parte de la Dirección General del Catastro.

El concejal nos comenta el acuerdo al que pretenden llegar:"Con esta moción pretendemos que el Ayuntamiento exija a la Agencia del Catastro de la Región de Murcia la revisión del valor catastral inmobiliario del municipio con el fin de normalizar los valores catastrales a valor de mercado actual, y que reduzca la tasa impositiva del IBI un 10 % para el ejercicio 2016, de manera transitoria y hasta que sean actualizados los valores catastrales".

Antonio Meca se queja del incumplimiento de los acuerdos plenarios:"13 meses después de aprobarse por unanimidad la revisión de los valores catastrales no se ha conseguido nada, es más, el propio equipo de gobierno subió la tasa impositiva en octubre de 2015 casi un 10 %, un mes después de votar que había que bajar el IBI".

?Pipican.

En este mismo pleno de octubre Ciudadanos va a presentar una ruego referente a la instalación, como en otras muchas ciudades, de los recintos caninos, "Pipican", en distintas ubicaciones de la ciudad con el fin de que los propietarios de perros puedan acceder a un enclave específico con el fin de evitar la suciedad e insalubridad de las calles, y que aumenten los controles contra los propietarios de mascotas que no cumplan con la normativa municipal vigente.

Meca explica el problema: "La no retirada de excretas de la vía pública lleva implícita una sanción con multas de 30,05 euros a 15.025,30 euros dependiendo de si la infracción es leve (entre 30 y 300 euros), grave (entre 30 y 300 euros) o muy grave (entre 2.400 y 15.000 euros). Pues bien, desde Ciudadanos hemos comprobado que el equipo de gobierno no hace nada para el cumplimiento de la Ley de Protección y Tenencia de Animales de Compañía, ya que las infracciones leves sancionadas fueron 6 en 2015 y 3 en lo que va de 2016".

Los excrementos caninos abandonados en las vías públicas son uno de los principales problemas de limpieza e higiene de la ciudad, y conlleva a infinidad de quejas vecinales y un estado lamentable de las calles de Lorca, problemática ligada a la falta de civismo de algunos propietarios de perros, que atentan contra la salubridad y la higiene del espacio público.

Para paliar estas conductas incívicas, en infinidad de ciudades se está implantando un enclave diseñado especialmente para estas mascotas (Pipican), consistente en un recinto vallado con un sistema de recogida de excrementos dotado de un dispositivo de agua, drenaje y conexión con alcantarillado, construido con materiales reciclados y a coste prácticamente cero, siendo igualmente un espacio de esparcimiento para estos animales.

"La solución a esta problemática es una demanda generalizada del comercio tradicional lorquino al afectarles muy directamente y con consecuencias graves a sus rendimientos comerciales, la mala imagen que supone las esquinas y aceras sucias de orines y excrementos".