El concejal socialista Diego José Mateos, ha presentado por escrito a través del registro municipal un documento que exige la finalización de los trabajos, alegando graves problemas de inseguridad y múltiples molestias a los afectados
Los vecinos de Cañada de Ánimas, en el barrio de San Cristóbal, han vuelto a expresar esta mañana su indignación por la paralización de las obras que afectan a su calle desde el mes de Julio del año pasado.
Los trabajos, que afectan a un tramo de unos 100 metros, se prolongan desde hace diez meses. Durante este tiempo los vecinos, la mayoría de edad avanzada, tienen graves problemas de movilidad, hasta el punto de no poder desarrollar con normalidad acciones cotidianas como ir a la compra o al médico.
Según los afectados, los pocos obreros que permanecen en la obra están parados porque "ni cobran, ni cuentan con el material imprescindible para realizar su trabajo". De hecho, hace quince días que se abrió una zanja de considerables dimensiones para reparar una conducción de agua, pero como no tienen las piezas necesarias, permanece abierta sin las pertinentes medidas de seguridad homologadas. Los operarios han colocado unos palés de madera con cinta plástica lo que no ha evitado que una vecina de la zona se cayera recientemente.
Otra de las quejas de los vecinos tiene que ver con una pronunciada pendiente que también ha provocado caídas de los vecinos y que, además, se está ejecutando muy por encima del nivel de las puertas de las casas y los garajes lo que ahora obligará a hacer modificaciones en estas edificaciones.
Los problemas de humedad, ocasionados por todos estos meses de desprotección del firme, es otra de la preocupación de los vecinos.
Los trabajos fueron adjudicados en noviembre de 2009 con un periodo de ejecución de tres meses. Sin embargo, no comenzaron hasta julio de 2010 para ser abandonados en Agosto. Tras una denuncia efectuada por el PSOE y los vecinos en Octubre se reanudaron los trabajos que volvieron a paralizarse poco después. En Enero vecinos y PSOE volvieron a exigir el fin de las obras. Entonces, la concejala del PP, Eulalia Ibarra, se comprometió a resolver este problema en quince días. Tres meses después, los afectados se encuentran en una situación "desesperada" y exigen que el Ayuntamiento cumpla su compromiso de una vez por todas.
Por su parte, el concejal socialista Diego José Mateos, ha presentado por escrito a través del registro municipal un documento que exige la finalización de las obras de Cañada de Ánimas alegando graves problemas de inseguridad y múltiples molestias a los afectados.