
La Concejalía de Protección Sanitaria sigue coordinando la retirada de bolsas de procesionaria en diversas zonas del municipio, tareas que realiza personal especializado. "Allá donde los técnicos o los vecinos detectan la presencia de estas orugas procedemos a su retirada, con todas las precauciones posibles porque es una plaga muy peligrosa", explica el concejal Francisco Juan Giménez, que indica que la última actuación ha sido en la zona frente a GrúasGil.
El objetivo de estas labores es prevenir los riesgos que esta oruga supone tanto para las personas como para las mascotas. Ante su presencia, se aconseja no tocarlas ni manipularlas y avisar a los servicios municipales (968.626.511).
La procesionaria del pino puede provocar reacciones alérgicas y problemas de salud, especialmente para los niños y los animales de compañía, que son los más vulnerables a los efectos de esta plaga.