Los vecinos y vecinas de la pedanía de La Media Legua de Las Torres de Cotillas despidieron ayer domingo 5 de octubre las fiestas en honor a su patrón, San Francisco de Asís. Y lo hicieron con una jornada en la que destacó la tradicional procesión por sus calles una vez caída la tarde y a cuya conclusión se lanzó un gran castillo de luces de fin de fiesta. Antes, por la mañana los más pequeños había disfrutado de un parque infantil, al mediodía se había celebrado en la Ermita de la pedanía una misa en honor al patrón y por la tarde se disputaron una carrera de pañuelos y un partido de fútbol de solteros contra casados.

Estas fiestas, que habían comenzado el pasado domingo 28 de septiembre con una jornada de convivencia con paella incluida, tuvieron de lunes a miércoles unas jornadas tecnológicas celebradas por la tarde en la Casa Rosa, las cuales contaron además con zona de juego para los más pequeños. El miércoles 1 de octubre también tuvo lugar la romería que ya caída la noche partió desde la Ermita y concluyó en el escenario situado en la pedanía para estos festejos.

Al día siguiente, jueves 2 de octubre los niños se divirtieron con una gymkana organizada por la "Asociación Cultural la Media Legua", aperitivo del tradicional refresco para todos los vecinos que tuvo lugar ya por la noche.

Muchas más actividades

El fin de semana fuerte de los festejos comenzó el viernes 3 de octubre por la noche con la actuación del grupo "Azalea", de la "Asociación Cultural la Media Legua" y del grupo "María Ángeles", en una velada que contó a partir de la medianoche con el concierto "Pacto entre caballeros", tributo a "Fito y Fitipaldis".

Las bicicletas fueron protagonistas en la mañana del sábado 4 de octubre con el "V Circuito de Bicicross", una prueba organizada por "Lagarto" y "Hermanos Sánchez Excavaciones CB Molina". Ya por la tarde, los vecinos de La Media Legua torreña se echaron a la calle para participar y disfrutar del desfile de carrozas y comparsas, en un día que concluyó a altas horas de la madrugada tras la obra de teatro titulada "Hay una cosa que te quiero decir", organizada por Juanjo el peluquero, y la posterior discomóvil.