En febrero de 2021, Stipa y ANSE denunciaron ante la Fiscalía la electrocución de, al menos, 6 búhos reales en un tendido eléctrico privado propiedad de una Comunidad de Regantes. Dicho tendido se encuentra en Jumilla entre los espacios naturales protegidos de sierra del Buey y sierra de El Carche, afectando de forma puntual a zona de protección. Todos los cadáveres de los búhos fueron comunicados a los Agentes Medioambientales de la Comunidad Autónoma de la Región de Murcia.
Tras las correspondientes Diligencias de Investigación, el Fiscal Superior remitió el pasado 19 de octubre de 2021 una comunicación a las organizaciones ambientales indicando que se había remitido denuncia del Ministerio Fiscal a los Juzgados de Jumilla al entender que se podrían haber producido un delito contra el medio ambiente y/o contra la fauna.
Se trata del primer caso de electrocución que se tramita en vía penal en la Región de Murcia y que, por tanto, abre un nuevo escenario en la corrección de tendidos. Por tanto, ambas organizaciones aplauden la iniciativa de la Fiscalía de perseguir los casos de muertes reiteradas de aves protegidas en tendidos eléctricos de la Región de Murcia y anuncian que se personarán como acusación particular en el caso.
En este sentido, las organizaciones recuerdan que, recientemente y tras otra denuncia ante la Fiscalía, la Comunidad Autónoma abrió expediente sancionador a Iberdrola por la electrocución de dos búhos reales en Mazarrón, advirtiendo que en caso de una nueva electrocución podría estar produciéndose un delito (1).
Pero estos no son los únicos casos enviados por la organizaciones ambientales de la Región de Murcia a la Fiscalía, pues se han remitido hasta 8 denuncias desde el mes de febrero de 2021 por diferentes casos (algunas denuncias recogen grupos de electrocuciones). En sólo 9 meses, las organizaciones ambientales de la Región de Murcia (ANSE, Stipa, Anida, Meles, Naturactúa, Ecologistas en Acción, Ulula y Caralluma) han recopilado, gracias a la colaboración ciudadana, 26 eventos que han supuesto la muerte de 41 aves en tendidos de la Región de Murcia. Se trata de 1 azor, 1 águila real, 11 búhos reales, 3 ratoneros, 6 cigüeñas blancas, 1 aguilucho lagunero, 7 cernícalos vulgares, 1 águila perdiceras, 7 gaviotas, 2 chovas piquirrojas y 1 águila culebrera. Además, conviene recordar que, según datos de la propia Comunidad Autónoma, en los últimos 8 años se han registrado la muerte de 933 aves, incluyendo 300 búhos reales (2).
ANSE y Stipa confían en que la intervención del Ministerio Fiscal acelere la resolución de este grave problema ambiental, ya que la muerte por electrocución supone la principal causa de muerte para diversas especies de aves gravemente amenazadas y protegidas. Igualmente, piden a la Comunidad Autónoma que adopte las medidas que se solicitaron en enero de 2021 (3), particularmente la aprobación de un decreto de valoración de las especies de fauna que determine el valor económico de cada ejemplar muerto por electrocución (aspecto al que se comprometió la Consejería en un escrito de respuesta). Por último, conviene señalar la importancia de la colaboración ciudadana para aflorar las muertes de aves protegidas en tendidos de la Región de Murcia y recuerda que no debe tocarse ni el cuerpo del animal, ni el apoyo y avisar inmediatamente a los Agentes Medioambientales a través del CECOFOR o al SEPRONA.