Concluye ahora un año marcado por el cambio de gobierno en el Ayuntamiento así como en el país, cambios que han de ser vistos como una nueva oportunidad para los ciudadanos y ciudadanas que han visto como en los últimos años se ha dilapidado los fondos públicos en proyectos nada productivos que no han hecho sino que abocarnos a la situación actual.
Un año marcado terriblemente por la crisis galopante que azota a todos los sectores de la sociedad y de forma especial, a las administraciones públicas que, por qué no decirlo, han asumido servicios y políticas que han provocado el déficit existente en las mismas. La consecuencia más grave de estas políticas es, sin duda, la situación en la que quedan las empresas y autónomos, a los que se les adeudan importantes sumas y que ha provocado, a su vez, que pasen verdaderos apuros en los mejores casos y, en los peores, produciendo el cierre de las mismas,
El Ayuntamiento de Jumilla adeuda a proveedores, cerca de siete millones, y es ésta la principal preocupación del equipo de gobierno que cumple ahora más de 6 meses. Unos meses caracterizados por la necesidad de tomar medidas, de responder de manera eficaz a las constantes sorpresas envenenadas que heredamos. Aún así, hemos afrontado con decisión y responsabilidad la gestión municipal, presentado unos Presupuestos para el año 2012 realistas, donde se prioriza el gasto social y el mantenimiento de los servicios básicos. Dejando de lado políticas que, aún siendo necesarias para Jumilla, no pueden ser atendidas de forma real sin aumentar la deuda municipal.
Han sido unos meses en los que el Ayuntamiento de Jumilla ha tenido que hacer frente a obras que aún habiendo sido subvencionadas por el Gobierno Regional en años anteriores, y habiéndose efectivamente ingresado las mismas, no habían sido ejecutadas con la consiguiente obligación de reintegrar el dinero. Obras del 2009 como lo son la rehabilitación de la cubierta del edificio central del Ayuntamiento, recientemente concluidas, otras como la infraestructura deportiva que se está ejecutando en la pedanía de la Fuente del Pino. Cabe añadir a estas obras, la también recientemente terminada, del vallado de los centros escolares Carmen Conde y Príncipe Felipe.
Meses en los que se han sentado las bases de una administración cercana, abierta y transparente. Meses en los que, lamentablemente, hemos tenido que convivir con actitudes impropias de una oposición constructiva. Especialmente la labor del Grupo Municipal socialista está siendo cuanto menos, irresponsable, quedándose al margen de decisiones duras pero no por esto menos necesarias. En contra, están centrados en lo que ya lo estaban cuando eran gobierno, en la publicidad vacía, en la propaganda de la ofensa permanente, ofensa que en muchas ocasiones ya, provocan en la sociedad jumillana no menos desasosiego que el que provocara, el hasta hace días, Presidente del Gobierno.
Es el momento de mirar al 2012 con optimismo, y con una obligada vocación de trabajo que permita afrontar los retos con la mejor disposición posible y que sin duda será, el esfuerzo de todos y de todas, lo que consiga que superemos la situación actual.
Un año que nos ofrece retos interesantes como garantizar la continuidad de las enseñanzas musicales en el municipio, que si bien ha sido una de las deudas más importantes de las heredadas, es, ahora, una prioridad para este equipo de gobierno su mantenimiento en las mejores condiciones posibles.
Un año que nos ofrecerá ver tras muchos anhelos, que se haga realidad el Museo del Vino, que sin duda será un puntal para el desarrollo turístico del municipio y, por ende, en el desarrollo económico y social de Jumilla.
Afrontamos el año 2012, con la misma ilusión que el primer día de esta legislatura y con la responsabilidad y la seriedad que requiere la situación municipal, y a esto nos comprometemos.
En nombre de todo el Equipo de Gobierno nuestros mejores deseos para el próximo año.