Una de las actividades estelares del programa del Centenario del Nacimiento del compositor jumillano Julián Santos, es el estreno, este fin de semana, de la Zarzuela ‘El Fantasma de la Tercia’ con música de Santos y letra de la escritora jumillana Ana María Tomás. Esta actividad está organizada por la Compañía Lírica Julián Santos y cuenta con la dirección de escena de Diego Carvajal y la dirección musical de Nicolás Gálvez.
El cuerpo de baile lo forman integrantes del Grupo de Coros y Danzas Francisco Salzillo y el coro ‘Dicantus’. La zarzuela tiene un reparto integrado por cantantes profesionales, así como un coro compuesto por más de 80 personas y una orquesta con 40 componentes, que suponen más de 100 personas en escena.
Las citas son el sábado 22 y el domingo 23 a partir de las 21:00 horas en el Teatro Vico de Jumilla.
Julián Santos y El fantasma de la Tercia
Según escribe Juan Chupe, sobre Julián Santos y ‘El Fantasma de la Tercia’ “Cuando Julián Santos viene al mundo la zarzuela conocía una época de esplendor, era la auténtica ópera popular española. Es precisamente en el periodo de producción musical de Julián Santos, cuando el género, aún vivo y estrenando interesantísimas obras ve iniciar la decadencia, al principio lenta, pero tras la horrible guerra civil, vino una posguerra gris, más bien negra para un género que llegará a desaparecer. No tenía Julián Santos el viento a favor cuando inició su trabajo, pero se unió a los compositores que, con esfuerzo, creatividad y energía, lograron dejar un largo listado de obras importantes, es el caso de maestros de la talla de Francisco Alonso Federico Moreno Torroba, Jacinto Guerrero y Pablo Sorozábal fueron compañeros de Julián Santos aunque nacieran unos años antes que él y dos incluso le sobrevivieron”.
“El fantasma de la Tercia es una zarzuela en tres actos que fechada en 1940 ha permanecido olvidada hasta su estreno, con motivo del centenario del nacimiento de Julián Santos. Ambientada en su ciudad natal, es un regalo para un pueblo que cada vez le admira más. La acción, inspirada en el teatro clásico, cuenta los amores y enredos propios del drama rural con tintes aristocráticos. El texto, posiblemente ideado por el propio compositor ha sido revisado y completado con esmero por Ana María Tomás. La partitura es inspiradísima y los temas utilizados abarcan desde motivos del folclore jumillano, hasta temas con un espíritu casi verista, pasando por todos los recursos del género en concertados y coros. La orquesta tiene un importante papel lejos del mero acompañamiento, con un tratamiento delicado, matizado en timbres y de una profunda carga dramática que sirve de sustento en el desarrollo de la acción. El lenguaje de Julián Santos es el propio del género con claras influencias neoclásicas en el tratamiento melódico y orquestal, el folclore es tratado en esencia, sin caer en el tópico nacionalista y la expresividad roza el sentido realista del pasado siglo”, añade Chupé.
Juan Chupé finaliza indicando que “la admiración que muchos sentimos por la obra de Julián Santos se acrecienta con el conocimiento de ésta, sea pianística, sinfónica o lírica. Sin duda, El fantasma de la Tercia, es una zarzuela grande, en todos los sentidos”.