Recientemente ha finalizado la vendimia 2008 en Casa de la Ermita y lo ha hecho con una “calidad de las uvas recogidas superior a la de añadas anteriores”, según informan fuentes de esta bodega quienes añaden que “ha sido gracias a una climatología favorable para el viñedo”.
Según palabras del enólogo y director técnico de la bodega, Marcial Martínez, “la cosecha 2008 se recordará como una de las mejores recogidas en los viñedos de Casa de la Ermita”.
En lo climatológico, esta cosecha se caracteriza por haberse beneficiado de las lluvias caídas a finales de 2007, superiores a la media, que permitieron que la vid quedase repleta de reservas para afrontar el ciclo de invierno y posteriormente los rigores del caluroso y seco verano del Levante español. Esto hizo, además, que la brotación, floración y cuajado de la uva fueran perfectas.
Desde Casa de la Ermita añaden que “un verano de calor no extremo, y noches en las que refrescó bastante, contribuyeron de manera decisiva al procurar una maduración lenta y progresiva, factor de vital importancia para la calidad de la baya”.
Finalmente, los controles periódicos (en mayor número según se acercaba la recolección de las uvas) realizados en las viñas de Casa de la Ermita, situadas en las laderas de “El Carche”, a unos 700m. de altitud, permitieron realizar la vendimia en el momento exacto, en esta ocasión de forma algo más tardía de lo habitual, detalle que ha permitido una mayor concentración y extracto, lo que conferirá al vino mayor estructura y carnosidad.
Una recolección y selección, dirigida por Marcial Martínez, que Casa de la Ermita ha realizado en sus viñedos de, entre otras variedades, Monastrell o Petit Verdot, y que formarán parte de las distintas y bien conocidas referencias de esta bodega jumillana, con especial atención a los que serán crianza y reserva 2008, los cuales todavía tardarán unos años en llegar a las copas de los más entendidos catadores.