La primera ministra italiana ha propuesto dar una ayuda mensual de 1000 euros durante cinco años a todas las madres que sigan adelante con su embarazo.. Para recibir la ayuda se debe ser ciudadana del país y se deben cumplir ciertos requisitos económicos.

Ya son varias las medidas provida aprobadas por el actual gobierno italiano:

El 14 de junio Meloni logró una importante victoria contra el aborto al conseguir que en el documento final del G7 no apareciera un compromiso de defender el “derecho” al aborto.

Otro logro de su partido fue la enmienda aprobada en Italia en abril que permitió la vuelta de las asociaciones provida a los centros abortistas ofreciendo una oportunidad para todas aquellas mujeres que se ven obligadas a abortar por motivos económicos.

Con estas medidas el gobierno italiano cumple más con la Constitución Española que lo que hace últimamente nuestro TC y nuestro Gobierno. No hace falta más que recordar la doctrina sentada por el propio TC en 1985: “el Estado tiene la obligación de garantizar la vida, incluida la del nasciturus (art. 15 de la Constitución), mediante un sistema legal que suponga una protección efectiva de la misma” (STC 53/1985).

Meloni dejó claro que su objetivo era reducir las cifras del aborto en Italia, aunque respetaría la actual ley del aborto.

Lo que está sucediendo en Italia saca los colores a muchos políticos españoles, ya que demuestra que, cuando hay voluntad, se pueden dar pequeños pasos que repercutan en la construcción de un futuro más justo.

No podemos dejar de recordar que medidas como estas ayudan también a paliar uno de los mayores retos que tenemos como sociedad, como es una natalidad tan baja que compromete nuestro futuro como civilización. 

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