El jefe de la Delegación de VOX en Bruselas ha recordado a los eurodiputados que "mientras estaban en sus casas, atemorizados por el virus de Wuhan, miles de agricultores españoles que trabajaban para que ustedes pudieran comer"
El vicepresidente de Acción Política y eurodiputado de VOX, Jorge Buxadé, ha vuelto a defender la agricultura española con toda la contundencia posible. Así, ha denunciado que la Unión Europea (UE) «lleva décadas maltratando al sector agrícola» y ahora «les piden que sean facilitadores de la transición verde». «Rechazamos cualquier iniciativa que suponga más obligaciones verdes, reducción de la productividad, subida de costes, aumento de las importaciones, o pérdida de empleo», ha insistido.
Así, ha recordado a todos los eurodiputados que, «cuando estaban en sus casas, atemorizados por el virus de Wuhan, había miles de agricultores españoles que trabajaban para que ustedes pudieran comer frutas, hortalizas o verduras». De modo que «no tenemos derecho a pedirles ni un solo sacrificio más». Y les ha recomendado: «Inmólense ustedes en el altar del fanatismo climático».
Tampoco ha pasado por alto que la Unión Europea haga responsables a los agricultores de Murcia o Huelva de la degradación de ecosistemas como el Mar Menor o Doñana: «Ustedes saben que la culpa es de su fanatismo, que derriba presas, y que impide la inversión en infraestructuras hidráulicas para llevar agua al campo español».
También ha lamentado que fue la Unión Europea la que decidió, hace tiempo, «que los agricultores abandonen y que la seguridad alimentaria de Europa quede en manos de países como Marruecos o Turquía». Es por eso que «Marruecos ha aumentado exponencialmente sus exportaciones a la Unión, hundiendo los precios en España y cerrando explotaciones».
Y ahora, la Unión, ha reprobado, paga a los agricultores españoles «financiando el plan de regadíos a Marruecos, mientras que criminalizan a nuestros agricultores». Y ha propuesto la imposición de «un arancel verde» a las importaciones «para compensar los sacrificios de nuestros productores como consecuencia del cumplimiento de las obligaciones comunitarias».