VALORES, partido político muy unido al mundo Sudamericano por sus relaciones históricas españolas, más que relaciones y, por sus gentes que viven entre nosotros como uno más de nuestra familia, tanto en España como en Occidente, y ante el desmadre habido estos pasados días con ciertos países latinoamericanos frente a la preparación de la Novena Cumbre de las Américas en Los Ángeles, del 6 al 10 de Junio, desea hacer las siguientes aportaciones para dejar claro nuestra postura hacia dónde deben ir siempre y en consonancia con las libertades individuales de cada uno de sus conciudadanos. Anhelamos desde España que a partir del Primer Día de la Cumbre, hoy 6, las libertades personales sean uno de los puntos referenciales de dicha unión de países.
NOVENA CUMBRE DE LAS AMÉRICAS
La novena Cumbre de las Américas , tal como ha pasado, tenía que haber sido precedida por otra novena: la de Santa Rita. Del 6 al 10 de junio se ha iniciado en Los Ángeles. Si tensiones ha habido antes de su inicio no es mucho aventurar que su finalización haya ido por carriles de pedregales. Parece ser que Biden ha dado señales de saber con quién se jugaba los cuartos y ha deseado a estar dispuesto en inaugurar una nueva etapa. Sobre España, en principio, como hasta ahora, ni sabe ni contesta y, hasta cierto punto parece aceptable aunque ya tiraba la toalla hacia sus queridos compatriotas según para qué y con quién. Nos da la impresión que las fricciones políticas no solo han desviado el foco de las importantes razones que justifican la cumbre sino que ponen en peligro acuerdos urgentes en materia económica, sanitaria, migratoria y de seguridad. Cómo no, sobre el mundo de las libertades mucho que hablar.
Valores ha venido observando que desde los tiempos de la colonia española, el ánimo de superación personal y el afán de fortuna privada han sido satanizados en nuestro medio como expresiones de egoísmo sibarita. Se han conjugado la rigidez de un conservadurismo reacio a la innovación, retóricas anticapitalistas del marxismo, militarismos arcaicos y un recurrente complejo de inferioridad disfrazado de exaltación nacionalista. Tal cóctel ideológico ha producido el más variopinto catálogo de "redentores". Perón, Castro, Chávez o el del "jersey", todos ellos caudillos de tomo y lomo, han perpetuado estructuras institucionales anacrónicas en nombre de alguna clase de tribalismo reaccionario.
Podría darnos la impresión, al contemplar la novena cumbre, que una cierta nociva actitud está, parece ser, empezando a tomar conciencia de este proceso, para fomentarlo en aquellos lugares donde todavía no existe, o para lograr que sea definitivo ahí donde parece haber llegado. ¿Estamos ante alguna transformación cultural donde se haya apostado por la libertad personal como mejor camino para alcanzar la prosperidad? Ese es el momento clave donde la figura del emprendedor debe desplazar a la del caudillo como protagonista del cambio. Pensamos que cuando se habla de "liberalización económica" no se refleja el lado humano del concepto que se busca abarcar con dicha frase. Sería más apropiado hablar de liberar el potencial creativo del emprendedor, ese personaje que mueve al mundo. El emprendedor es todo aquel que imagina un futuro posible, se impone una meta y aprovecha toda oportunidad que se presenta para lograrla. Da igual que si su objetivo consiste en fundar un banco, poner un restaurante, componer una canción o escribir un libro. Lo importante es esa actitud de vigilancia constante ante su entorno para cultivar las coyunturas favorables que se presenten. Serán ellos quienes nos abastecerán diariamente de toda clase de bienes y servicios. En la parte opuesta, cada vez que nuestros "redentores sudamericanos" de turno han interferido en este proceso inventivo de intercambio, el mercadeo, mediante impuestos, censuras o trabas burocráticas, lo único que han logrado es entorpecerlo, y por tanto empobrecernos a todos. En España llevamos cierto camino similar.
Chile, Perú, Colombia y Uruguay parecían que en cierto modo iban en buen camino. Lamentablemente, Ecuador, Bolivia y Venezuela, las órbitas del socialismo del siglo XXI, siguen siendo la senda contraria. La inversión extranjera huye y el crecimiento de empleo mejor no hablar. A cambio, el aparato estatal no hace más que engordar y las empresas privadas se hacen adictas al gasto fiscal donde al final, la escena sigue su cauce desarrollándose en torno al magnetismo popular del caudillo. No hemos de olvidar que estas políticas estatistas han sido también promovidas por los supuestos organismos "neoliberales". Más aún, la llegada de Rafael Correa al poder significó un retoño de esperanza aunque sabíamos de sus simpatías con el tradicional socialismo latinoamericano. Ante estos días de Cumbre en Los Ángeles, desde España, miramos a nuestros hermanos de América del Sur y Centroamérica diciéndoles: " Ya está bien, no necesitáis más héroes, ni redentores, ni líderes mesiánicos. Lo que la querida América Latina necesita es liberar el potencial de sus emprendedores. El destino os pertenece y debéis reclamarlo, todos, uno a uno de vosotros".
Desde hoy, Valores, ha sido invitada al Primer Congreso Internacional Hispanoamericano sobre el mundo hispánico-global atendiendo a la memoria y su futuro que organizan la Universidad Francisco de Vitoria y la Fundación Universitaria Unir, del 22 al 24 de junio. Tras asistir a este Primer Congreso esperemos abrir horizontes en cómo y de qué manera podemos apoyar a este mundo al que tanto estimamos desde España y supongo que también Portugal.