Aldeas Infantiles SOS ha evacuado temporalmente a 110 niños y niñas de sus Aldeas de Brovary (Kiev) y Lugansk, que han sido trasladados a un lugar seguro en el oeste de Ucrania, con el fin de garantizar su protección y reducir sus niveles de ansiedad y estrés derivados de la tensión creciente ante el clima prebélico que vive el país.
Los psicólogos de Aldeas Infantiles SOS han detectado que los niños y niñas que atienden en Ucrania ya sufren los efectos del estrés prolongado, “que viene acompañado de miedos, pesadillas, alteraciones del comportamiento y de su capacidad de comunicación, y un aumento de la ansiedad, además de la disminución de su rendimiento académico”.
La organización de atención directa a la infancia prepara un plan de emergencia que activaría en caso de una rápida escalada del conflicto armado, y que incluye la provisión de necesidades básicas (alimentos, agua y artículos de higiene) en todos sus programas y reubicaciones de niños, niñas, familias y profesionales en otras zonas del país.
Aldeas Infantiles SOS trabaja en Ucrania con niños, niñas, adolescentes y familias en situación de vulnerabilidad desde 2003. En la actualidad interviene en las regiones de Kiev y Lugansk, tanto en la zona controlada como en la no controlada por el Gobierno, mediante Programas de Prevención y Fortalecimiento Familiar, dirigidos a mejorar las condiciones de vida de las familias en situación de riesgo y de evitar separación de padres e hijos. Además, la organización también cuenta con varios Programas de Protección en los que proporciona un cuidado alternativo de calidad en entornos familiares protectores a niños y niñas que han perdido el cuidado de sus padres.
Tras estallar la guerra del Donbass en 2014, Aldeas también lanzó un Programa de Respuesta a Emergencias en Lugansk y Donetsk, que a día de hoy continúa proporcionando ayuda humanitaria, apoyo educativo, asistencia emocional y servicios de fortalecimiento familiar. “Los niños de Donbass no saben lo que es vivir un día sin ansiedad, tensión y disparos”, aseguran desde la organización. “Las familias llevan una vida de aparente normalidad en la que un simple camino a la escuela, al trabajo o a una cita médica es una pesadilla logística, financiera y angustiosa”.
Entre todos sus programas, Aldeas Infantiles SOS atiende a 2.000 niños, niñas y adolescentes y a 743 familias en Ucrania.