Tras cinco años de conflicto son 19,7 millones de personas las que no tienen acceso a una atención médica adecuada en Yemen y más de la mitad de la población sufre inseguridad alimentaria severa
La población se enfrenta a un alto riesgo de enfermedades transmitidas por el agua y epidemias
La peor epidemia de cólera en Yemen ha dejado ya 1,7 millones de personas afectadas y casi 3.500 muertes desde 2016
Desde marzo de 2015, la guerra en Yemen ha causado la destrucción de las infraestructuras de agua y ha interrumpido gravemente su abastecimiento para millones de personas, con consecuencias sanitarias dramáticas. La población se enfrenta a un alto riesgo de enfermedades transmitidas por el agua y a epidemias como el cólera.
Cinco años después del comienzo del conflicto, 19,7 millones de personas no tienen acceso a una atención médica adecuada y más de la mitad de la población padece una inseguridad alimentaria severa.
La población civil es la primera víctima de la degradación de las redes de agua que propagan enfermedades y causan una la alta mortalidad entre los niños y las niñas menores de cinco años, además de un pobre estado nutricional de toda la población.
Como consecuencia, Yemen ha sufrido brotes de cólera recurrentes que el mundo nunca había visto antes, con 1,7 millones de personas afectadas y casi 3.500 muertes desde 2016.
Desnutrición y agua
Alrededor del 51% de la desnutrición en el mundo está asociada a condiciones inadecuadas de las infraestructuras de agua y saneamiento. Hoy, 7 millones de personas padecen de desnutrición en todo el país, incluidos 2 millones de niñas y niños, lo que representa uno de cada cinco niños.
El colapso del acceso al agua y el saneamiento ha llevado al país a depender de la ayuda humanitaria. Son 4 millones de personas las que reciben el suministro de agua mediante camiones cisterna, pero este sistema se ve afectado regularmente por la falta de combustible que impide a los camiones llegar hasta su destino.
Con la limitada disponibilidad y el aumento imparable de los precios del combustible debido al bloqueo que sufre el país, muchas comunidades ya no pueden permitirse el acceso a agua potable, lo que tiene repercusiones dramáticas en su salud.
Para millones de niñas y niños en Yemen, el acceso a agua potable de buena calidad es una cuestión de supervivencia. Acción contra el Hambre trabaja diariamente con la población para rehabilitar las redes de agua y los pozos comunitarios, y para controlar la calidad del agua.
Gracias a su trabajo, más de 27 000 personas pueden beneficiarse del suministro diario de agua con camiones en el campamento de Al-Hali, en la gobernación de Hodeïda. Los programas de seguridad alimentaria mediante la distribución de cupones y transferencias de efectivo proporcionan a las familias ingresos adicionales para satisfacer sus necesidades básicas, incluida la compra de agua cuando no disponen de una fuente.
Acción contra el Hambre en Yemen
Trabajamos en Yemen desde 2012 y prestamos apoyo a más de diez centros de atención de la salud con un conjunto mínimo de servicios, incluido el tratamiento de los casos de desnutrición aguda severa y desnutrición aguda moderada.
Como parte de nuestra respuesta de emergencia, estamos distribuyendo kits de higiene y dignidad a la población desplazada. Así, respondemos mejor a las necesidades de las personas en peligro en el largo plazo. Trabajamos en las provincias septentrionales de Al-Hodeida y Hajjah, así como en las provincias meridionales de Adén, Abyan y Lahij.
Con 274 trabajadoras y trabajadores en tres bases (Sana'a, al-Hodeida, Adén) y dos subbases (Hajjah y al-Jhojha), nuestro principal objetivo en Yemen es aliviar el sufrimiento causado por la desnutrición, tratándola y abordando sus causas subyacentes.