
Algunas de las claves más importante para disfrutar de estos vinos son la temperatura a la que se sirven o elegir sabores con los que mariden a la perfección
Productos artesanos andaluces, como el queso de cabra curado en manteca, el atún en manteca o las aceitunas IGP Manzanilla de Sevilla son tres acompañantes perfectos para el Fino y la Manzanilla
Entre los meses de marzo y junio se prevé un consumo de 1,5 millones de medias botellas de Fino y Manzanilla
Las lluvias de marzo han retrasado la llegada oficial de la primavera a las calles, pero los rayos de sol ya animan a la gente a salir a disfrutar de un buen aperitivo, y en esta época tan vibrante no hay mejores vinos para brindar que con la Manzanilla y el Fino.
La temperatura a la que se sirven, el tamaño de su botella o platos con los que maridan a la perfección son algunas de las claves más importantes para disfrutar de una copa de estos vinos durante el periodo primaveral.
La mejor forma de disfrutar del Fino y la Manzanilla en primavera
Cuando suben las temperaturas, el cuerpo pide frescura. En esta época del año, los vinos blancos se convierten en la elección ideal, y dentro del Marco de Jerez, el Fino y la Manzanilla destacan por su carácter refrescante y su versatilidad gastronómica.
Servidos muy fríos, entre 6 y 8 grados, resultan perfectos para calmar la sed en los días cálidos. Para mantener esta temperatura óptima, lo mejor es utilizar una cubitera con hielos y, si es posible, optar por medias botellas, que permiten disfrutar de 6 copas sin que el vino pierda sus propiedades.
Su abanico aromático evoca la brisa marina y los días soleados, mientras que su armonía con platos frescos los convierte en el maridaje estrella del buen tiempo. Por último, la copa en la que se sirven también influye en la experiencia. Una copa de vino blanco adecuada, de cristal fino y cogida siempre por la base para no calentar el contenido, realza las cualidades de estos vinos generosos. Tradición, personalidad y frescura se unen en el Fino y la Manzanilla, conquistando año tras año a quienes buscan el equilibrio perfecto entre carácter y ligereza.
Los mejores maridajes
Una copa de Fino o Manzanilla también se disfruta más cuando viene acompañada de un buen aperitivo, y más en primavera. Precisamente, junto a los Vinos de Jerez y la Manzanilla de Sanlúcar, el atún, el queso de cabra o las aceitunas IGP Manzanilla de Sevilla son otros iconos de la gastronomía gaditana. El carácter seco de estos vinos equilibra al instante la sensación grasa, como la del atún en manteca ibérica o el queso curado en el mismo producto, refrescando cada bocado. La salinidad y sapidez de los vinos potencian el sabor delicado del atún con un agradable final de frutos secos. Estos vinos también potencian el sabor de la leche de cabra y armonizan con las sensaciones salinas del queso. Por último, para completar este aperitivo andaluz, unas aceitunas con el tradicional "aliño sevillano" son el acompañamiento más popular para unas primeras copas de Fino o Manzanilla en cualquier barra del Marco. Aceitunas y vinos comparten en este caso muchas sensaciones similares: sabores salinos, notas de frutos secos y un final algo amargo.
Consumo récord de Fino y Manzanilla en primavera
Durante el periodo primaveral se prevé que el consumo de Fino y Manzanilla supere las 1,5 millones de medias botellas. Una cifra récord que sin duda volverá a situar a estas variedades como los reyes de la primavera y sus aperitivos.
Con su frescura y su capacidad para realzar los sabores, el Fino y la Manzanilla seguirán siendo los protagonistas de los momentos de encuentro y celebración en terrazas, bares y reuniones al aire libre. Un brindis con estos vinos no solo significa placer, sino también una tradición que se renueva año tras año con la llegada del buen tiempo.