El crecimiento del comercio electrónico ha traído nuevas oportunidades, pero también desafíos en seguridad y reputación. La suplantación de identidad y fraudes afectan tanto a las empresas como a sus clientes, sumándose a los ataques cibernéticos y difamación, utilizados para desacreditar negocios legítimos.
En este contexto, Allzone, un ecommerce en expansión en España y Portugal, ha enfrentado intentos de socavar su crecimiento y reputación. Con más de cinco años en el mercado, la empresa ha construido una imagen basada en confianza y calidad, un esfuerzo desafiado por numerosas acciones fraudulentas de terceros.
Ante esta situación, la empresa ha tomado medidas para proteger su actividad y garantizar la seguridad de sus clientes a través de canales oficiales de contacto.
Suplantación de identidad y fraudes: acciones legales y medidas implementadas
Uno de los incidentes más graves ha sido la aparición de distintas páginas web fraudulentas, una de ellas empleaba el dominio "AlIzone", con una "i" mayúscula en lugar de una "L" minúscula, en un intento por confundir a los clientes. Esta plataforma utilizó la identidad visual y los datos fiscales del ecommerce español para realizar operaciones fraudulentas.
Asimismo, Allzone ha denunciado la detección de otra web, "electrochollos", que ha replicado imágenes corporativas, fotografías de empleados e información de la empresa para estafar a compradores desprevenidos. Durante más de ocho meses, esta web ha generado confusión y daños a consumidores y a la imagen corporativa.
La empresa ha interpuesto denuncias formales contra ambas plataformas y ha alertado a los organismos pertinentes. Además, ha reforzado la comunicación con los clientes para identificar la web oficial y garantizar compras seguras en Allzone, implementando descuentos para los afectados y fortaleciendo la confianza en la marca.
Ataques cibernéticos y difamación: impacto y respuesta de Allzone
A lo largo del último año, la empresa ha sido víctima de diversos ataques cibernéticos, algunos de los cuales han afectado la operatividad de su sistema. Se han detectado intentos de extorsión exigiendo rescates por la recuperación de datos, aunque sin filtración de información de clientes. Sin embargo, estas acciones han ralentizado la gestión de reembolsos y devoluciones.
Además, Allzone ha sido blanco de una campaña de difamación, con múltiples correos electrónicos falsos que han generado comentarios negativos en una conocida plataforma de opinión abierta. Estas valoraciones no están vinculadas a compras reales, permitiendo que personas ajenas al servicio publiquen críticas sin justificación. Desde principios de 2024, se han identificado más de 15 ataques masivos de este tipo, y la empresa sigue un proceso legal para localizar a los responsables, quienes enfrentarán acciones judiciales.
Es importante destacar que en otros canales de valoración que exigen pedidos reales para poder opinar, su reputación se mantiene alta, alcanzando y superando una calificación de 4.2 estrellas sobre 5. Esto refleja la satisfacción de clientes que han experimentado su calidad y servicio de primera mano.
Para mitigar los efectos de estos incidentes, se han implementado nuevas políticas de reembolso y atención al cliente. En los casos en los que ha sido necesario un análisis manual, los clientes reciben el importe de su reembolso con una bonificación del 3% adicional. Esta medida ha favorecido la recuperación de pedidos y ha mejorado la percepción del servicio.
Compromiso con la seguridad y canales oficiales de contacto
A pesar de estos desafíos, Allzone sigue expandiéndose en España y Portugal, manteniendo su compromiso con la seguridad, la calidad y la confianza del cliente. La empresa cuenta con más de 50 empleados entre sus oficinas en Madrid y Málaga, además de personal en teletrabajo en distintas regiones del país.
