Para los escolares con ganas de aprender y explorar, las actividades extraescolares son una gran oportunidad para desarrollar habilidades que complementan la educación en las aulas. En colegios de toda España, se están implementando propuestas como clases extraescolares de ajedrez, robótica y programación de videojuegos, y talleres de cubo de Rubik, todas pensadas para estimular la creatividad y el pensamiento crítico desde temprana edad. Estas actividades, diseñadas para estudiantes a partir de los 6 años, ofrecen mucho más que entretenimiento: invitan a los niños a sumergirse en el desafío de resolver problemas y a disfrutar el proceso de descubrir soluciones.
El ajedrez es una materia excelente en la etapa escolar
Las clases de ajedrez, por ejemplo, están demostrando ser una herramienta eficaz para mejorar la concentración, la memoria y la capacidad de planificación en los alumnos. Además, muchos centros educativos organizan torneos entre colegios, promoviendo la sana competitividad y la práctica del ajedrez como un deporte de estrategia y reflexión. Los estudiantes no solo se benefician del juego en sí, sino que desarrollan habilidades sociales y emocionales en un entorno colaborativo. Son muchos los colegios que han dado el paso para poner en marcha esta actividad de alguna forma, bien dentro de las actividades curriculares o como actividad complementaria.
Tecnología y diversión unidas de la mano
Otra opción muy valorada es la actividad extraescolar de robótica y programación de videojuegos, que introduce a los más jóvenes en el mundo de la tecnología de una forma accesible y divertida. Al trabajar con robots y crear sus propios videojuegos, los alumnos desarrollan lógica y creatividad. Estas actividades les permiten entender el funcionamiento de máquinas y aprender los principios básicos de programación, preparándolos para un mundo en el que estas habilidades son cada vez más importantes.
Por último, los talleres de cubo de Rubik ofrecen un enfoque único para los niños interesados en los retos de lógica y resolución de problemas. En lugar de solo enseñar técnicas para resolver el cubo clásico, estos talleres fomentan el razonamiento en cada paso, de modo que los estudiantes puedan resolver otros tipos de cubos y aprender a disfrutar el proceso de enfrentarse a problemas complejos.
En este contexto, Ajedrez Blanco y Negro destaca por combinar estas propuestas con una experiencia veraniega de alto nivel, a través de un campamento con piscina y actividades al aire libre que se desarrolla cada año en Madrid. Durante el curso escolar, la empresa también organiza torneos de ajedrez entre colegios, creando un espacio en el que los estudiantes pueden poner en práctica lo aprendido en un ambiente ameno y motivador. Gracias a estos programas, los niños no solo desarrollan habilidades intelectuales y sociales, sino que también descubren la satisfacción de resolver problemas y alcanzar logros.