Hasta el 90% de los inconvenientes con las lentes de contacto cosméticas o de fantasía derivan de una manipulación incorrecta, falta de mantenimiento o un uso prolongado.
La utilización de lentes no homologadas puede causar problemas como irritación, conjuntivitis, reacciones alérgicas e incluso pérdida de visión en los casos más graves.
Halloween es una época del año en la que los disfraces y los complementos juegan un papel protagonista y, entre ellos, las lentes de contacto cosméticas o de fantasía. En este sentido, el Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas (CGCOO) alerta sobre los riesgos que tiene para la visión la adquisición de estos accesorios fuera de las ópticas y sin la adecuada supervisión de un profesional óptico-optometrista.
Estas lentes, diseñadas únicamente para modificar la apariencia y el color de los ojos, son fácilmente accesibles a través de internet, bazares o centros de belleza, donde no hay garantías sanitarias. Por ello, el uso de lentes no homologadas puede causar problemas como irritación, conjuntivitis, reacciones alérgicas e incluso pérdida de visión en los casos más graves.
En esta línea, el presidente del Consejo General de Colegios de Ópticos-Optometristas (CGCOO), Juan Carlos Martínez Moral, explica que "las lentes de contacto cosméticas son legalmente productos sanitarios de adaptación individualizada, por lo que su manipulación y prescripción corresponden obligatoriamente a un profesional sanitario, como es el óptico-optometrista".
Lentes cosméticas: riesgos asociados y recomendaciones
El uso inadecuado de lentes de contacto cosméticas no solo afecta a la salud visual, sino que puede comprometer la calidad de vida del usuario. Los síntomas como sequedad ocular, enrojecimiento, dolor o sensación de arenilla pueden ser indicios de complicaciones serias. Según el CGCOO, hasta el 90% de los problemas con las lentes cosméticas derivan de una manipulación incorrecta, falta de mantenimiento o un uso prolongado.
Para prevenir estas complicaciones, los ópticos-optometristas han elaborado una serie de recomendaciones que se pueden tener en cuenta de cara a la celebración de Halloween.
Adquirir las lentes en ópticas, donde un óptico-optometrista colegiado garantizará su correcta adaptación y calidad.
Lavarse las manos antes de manipular las lentes y asegurarse de que estén limpias antes de colocarlas.
Las lentes de contacto cosméticas suelen utilizarse como complemento de otros productos de belleza como el maquillaje, por lo que deben colocarse antes del maquillaje y retirarse tras el desmaquillaje.
Como se trata de un accesorio puntual, es importante no utilizar las lentes cosméticas más horas de lo estipulado.
Limpiar las lentes de contacto de manera cuidadosa y con regularidad.
Guardar las lentes en un portalentes apropiado y reemplazarlo como mínimo cada tres meses.
Utilizar solo los productos recomendados por el óptico-optometrista para limpiar y desinfectar las lentes.
Acudir al óptico-optometrista de manera regular para una revisión ocular.
Ante cualquier problema o molestia acudir al óptico-optometrista y a su óptica de confianza.
Otros accesorios de Halloween que afectan a la visión
Además de las lentes de contacto, otros elementos como maquillaje, pelucas y antifaces también pueden representar un riesgo si no se utilizan adecuadamente. El maquillaje que no esté específicamente diseñado para el área ocular puede provocar infecciones, mientras que las pestañas postizas y las pelucas pueden desprender partículas que se introducen en los ojos.
En la misma línea, las máscaras y antifaces deben permitir una adecuada ventilación, ya que el calor y la humedad pueden generar molestias si se usan con lentes de contacto. Además, una visión limitada por el uso de estos accesorios aumentaría el riesgo de caídas y accidentes.