José Cedena nació en un pueblecito de Toledo, llamado Malpica de Tajo. Allí ha vivido siempre y allí sigue viviendo en la actualidad. Es muy grande el arraigo que el autor mantiene con su localidad, con su tierra castellano-manchega. Y así lo demuestra el hecho de que muchas de sus obras y sus sainetes se desarrollen en su pueblo, intentando -como así manifiesta- darle notoriedad y colocarlo en el mapa. Por citar algunos ejemplos: “Consulteando por Malpica”, “Que mal pica por Malpica”, “Los picores de Malpica”, “Robo de siesta y borrica a un vecino de Malpica”, “La novia de Cacerolo”, “Los niños de ochenta y tantos” y algún otro más sitúan la escena en este pueblecito toledano.

Así mismo queda patente esa comunión de Cedena con su pueblo en muchos de sus personajes, algunos inspirados en personas conocidas de su entorno; en el argot y los chascarrillos que utilizan, propio de su tierra y de ese humor manchego que tanto gusta en el país.

Recientemente, acaba de terminar -no tardando mucho estrenará- y, como no, publicará, su última creación: “Cuatro bolos en Madrid”. Una obra donde presenta a cuatro vejetes, dos de ellos de Cebolla -el pueblo vecino- y dos de Malpica, todos ellos residentes en Madrid. Otra obra más de esas en las que el autor pretende, además de divertir, reflejar a su tierra, a su gente, concretamente, en este caso, a sus mayores; haciendo esta vez especial hincapié en ese localismo famoso con el que se identifica a los toledanos y a la provincia del “bolo”.