Las mascotas ocupan un lugar importante en las familias, convirtiéndose en un miembro más de las mismas. Es por ello que los dueños buscan diferentes formas de inmortalizar el vínculo que se crea con los animales. Desde fiestas de cumpleaños hasta llaveros son algunos de los ejemplos que dan evidencia de la fuerte relación. Entre estos elementos, los retratos de mascotas personalizados han tomado fuerza como una forma artística de capturar su esencia. Con esta premisa, Eva Carballares crea hermosas piezas artísticas que capturan la esencia de estos importantes miembros de las familias.

Los retratos como forma de inmortalizar a las mascotas

Cada mascota tiene una personalidad distinta que los hace únicos. Los cachorros se caracterizan por su alegría y energía, los gatos los identifica su serenidad y a los animales adultos se les atribuye sabiduría. Es precisamente esa esencia la que logra capturar Eva Carballares en cada una de sus piezas artísticas. La artista logra plasmar estas cualidades en sus pinturas, creando elementos que no solo representan a las mascotas de forma realista, sino que transmiten sus emociones y singularidades. A esta artista la identifica su atención al detalle. Desde la suavidad del pelaje, hasta la profundidad en la mirada, Eva Carballares logra que cada retrato transmita la esencia de la mascota. Esto convierte a sus obras en homenajes a la vida de aquellos que ocupan un lugar especial en el corazón de sus dueños.

El proceso creativo que transforma una fotografía en un mágico retrato

Eva Carballares trabaja directamente con sus clientes con el fin de asegurarse de que cada retrato refleje lo que el dueño de la mascota desea. El proceso empieza con una conversación para definir el estilo y el enfoque del retrato. Luego, la artista solicita diferentes fotografías de referencia que le permitan captar los ángulos y expresiones del animal. Creando una composición que refleje la apariencia física y, más específicamente, la esencia de la mascota. Eva Carballares convierte la pintura en una forma de inmortalizar el amor y la conexión entre el ser humano y su mascota.