La ingeniería e instaladora vizcaína da paso a una nueva estrategia para posicionarse como proveedor de instalaciones y servicios para la descarbonización de la industria
Tras cumplir 18 años de actividad, Bikote Solar ha desarrollado una nueva estrategia con la que pasará a convertirse en una empresa de servicios e instalaciones energéticas orientada a la descarbonización, incorporando una nueva marca denominada BIKOTE NET 0.
Hasta la fecha, Bikote Solar ha ejecutado cientos de instalaciones de energía solar en todo tipo de sectores y clientes, integrando almacenamiento en algunas de ellas y trabajando también bajo la modalidad PPA. Con esta nueva iniciativa se incorporan a la oferta del grupo otras tecnologías como la aerotermia y nuevos servicios como la gestión de los Certificados de Ahorro Energético (CAE) y la consultoría energética orientada principalmente al cálculo de la huella de carbono y los planes de descarbonización. En una segunda fase, la empresa entrará en el negocio de la monitorización, para lo que no se descarta valorar operaciones inorgánicas o estrechas colaboraciones con actores destacados del sector.
Con esta estrategia, Bikote pretende facilitar a sus clientes una oferta integral de soluciones en el ámbito de la energía y convertirse en un proveedor recurrente de servicios dentro de esa área. Bikote extenderá esta nueva oferta de tecnologías y servicios a todas las zonas donde opera: País Vasco, Cantabria, Asturias, Navarra, La Rioja y Castilla-León.
La empresa ya ha comenzado a proyectar instalaciones de aerotermia en clientes que ya contaban con instalación fotovoltaica; se trata de dos tecnologías totalmente sinérgicas que optimizan perfectamente el consumo energético una vez que se ha electrificado la climatización con bombas de calor. Por otra parte, Bikote está ya intermediando en la gestión de Certificados de Eficiencia Energética (CAEs) en los clientes que están ejecutando o van a ejecutar proyectos de eficiencia energética, lo que les permite monetizar los ahorros energéticos y, conjuntamente con subvenciones y deducciones fiscales, reducir de forma muy sustancial el retorno de esas inversiones.