La Ley de Segunda Oportunidad permite a una vecina de San Bartolomé de Tirajana recuperar su estabilidad económica al cancelarle una deuda de 42.000 euros. La situación económica de la afectada empezó a deteriorarse a causa de su divorcio, a la reducción de ingresos que ello supuso se añadieron también problemas de salud que con el tiempo le condujeron a declararse insolvente.
Tras su divorcio tuvo que hacer frente en solitario a una serie de préstamos y créditos. Sus ingresos no eran suficientes para poder sufragarlos, así que recurrió a nueva financiación externa. En este contexto, la afectada fue diagnosticada con fibromialgia, una enfermedad que causa dolor crónico, fatiga y otros síntomas debilitantes que le impiden realizar tareas cotidianas y que implica unos gastos de medicación elevados. Con sus reducidos ingresos, además, ayudaba a su hermana y a su padre, ya que ambos estaban recibiendo tratamientos médicos.
La asesora de Canarias Sin Deuda, Adriana Cruz, explica que “los productos crediticios adquiridos durante un matrimonio pueden perjudicar a una de las partes en caso de divorcio, pasando de un gasto compartido a una deuda afrontada por una sola persona. En el caso de nuestra clienta, a esta dificultad se añade una enfermedad que hizo que su situación económica se debilitara aún más”.
Actualmente y gracias a la ayuda de Canarias Sin Deuda, está libre de deudas. “En el momento en el que se me comunicó la cancelación total de mi deuda, por fin pude respirar de nuevo y comenzar una nueva vida”, afirma la clienta.