Durante los dos primeros meses del año 2022 el programa Prevención Violencia, gestionado por la Fundación Isadora Duncan, trabajó en una herramienta digital que permite detectar posibles circunstancias de violencia económica en pareja a través de la reflexión sobre situaciones relativamente normalizadas. En marzo de ese mismo año se comenzó a implementar la estrategia de difusión de la herramienta con el fin de conseguir acercar el concepto de violencia económica a la sociedad y ofrecer información sobre esta manifestación invisibilizada de violencia contra las mujeres.
El objetivo de la encuesta es doble: por un lado, se pretende recabar información sobre cuántas mujeres pueden estar sufriendo violencia económica por parte de su pareja y, por otro, reflexionar sobre las situaciones normalizadas que puedan ser detectadas como posible violencia económica.
Durante el periodo de tiempo que la encuesta estuvo abierta (un año y seis meses) y, tras aplicar los criterios de inclusión previamente formalizados, se conforma una muestra final 426 mujeres.
A partir de los datos obtenidos y colocando su contexto en cuanto al tipo de encuesta que se diseña, su estrategia de difusión y el número de muestra que se toma como referencia, se pueden extraer las siguientes conclusiones:
La violencia económica es una de las manifestaciones de violencia de género que sufren las mujeres que se encuentran en pareja, en este caso, más normalizadas por las propias víctimas y por su entorno. Existe un nivel de riesgo muy alto captado en algunas preguntas que reflejan comportamientos de abuso.
El 91,5% de las mujeres encuestadas manifiestan estar sufriendo violencia económica, aplicada en mayor o menor medida. Destaca la negativa de toma de decisiones sobre las opciones de gastos o la participación en decisiones bancarias.
Tan solo el 8,5% de las mujeres encuestadas son catalogadas como “sin riesgo” de sufrir violencia económica, pero ninguna de ellas evidencia una relación absolutamente equilibrada, ya que en alguna de las preguntas sí puede apreciarse la vivencia de situaciones de violencia económica, aunque no lleguen al mínimo estipulado para considerarse una relación de abuso.
Algunos ítems describen situaciones previsiblemente delictivas que son completamente normalizadas tanto por las víctimas como por su entorno, ya que ninguna de las mujeres encuestadas aprecia riesgo en sus relaciones, pese a que ciertas preguntas inviten a la reflexión de los acontecimientos.
Más información y acceso al estudio completo en: prevencionviolencia/sabes-si-estas-sufriendo-violencia-economica-analisis-resultados/