La peculiaridad de la comarca de El Bierzo la hace realmente singular, pues se trata de un entorno donde se están desarrollando proyectos de los más importantes enólogos y bodegas de renombre. En ese marco se encuentra uno de los más destacados proyectos, el de Bodegas y Viñedos Gancedo, una bodega familiar situada en Quilós (Cacabelos) que, además de elaboradores, son viticultores y, actualmente, cuentan con 600 parcelas y 85 hectáreas de viñedo en propiedad. Dentro de su filosofía como hacedores de vinos de calidad está el fomentar el respeto sostenible e integrado con el medioambiente. Creen en la tradición vitícola de la zona, de la que han aprendido a trabajar sus viñedos y basan su trabajo en la vida integrada con la naturaleza con quien comparten el tiempo y la experiencia, sin invadirla, recuperando plantaciones de árboles frutales que aseguran el terreno contra lluvias torrenciales, absorbiendo C02, produciendo oxígeno, limpiando así el aire y creando un ecosistema de vida vegetal y animal.
Son los herederos de generaciones anteriores que se dedicaron a la viticultura y a la producción de vinos como medio de vida habitual dentro de la comarca berciana, con conocimientos adquiridos por las profesiones de los propietarios de la bodega, ingenieros de profesión y expertos en estudios de suelos (terroirs). Sus viñedos se dibujan en el territorio en forma de herradura desde el incomparable marco en el que se alza su bodega. El respeto al medioambiente es religión en la bodega, acaparando, a pesar de las dificultades, la mayor superficie de viñedo ecológico en el noroeste de España, con cerca de 100 hectáreas en propiedad. Este territorio se ha conseguido con el paso de los años comprado, recuperado y reconvirtiendo el viñedo, siempre en búsqueda de las mejores ubicaciones situadas en laderas, orientaciones adecuadas, altura y suelos graníticos, calizos, francoarenosos, cuarcíticos..., que les permiten producir vinos con su propia identidad.
Este esfuerzo, dedicación y objetivo claro, después de años de trabajo enfocado en la sostenibilidad, calidad y salud del suelo, les ha permitido conseguir la certificación CAECYL de agricultura ecológica. Este logro representa el compromiso de trabajar en armonía con la naturaleza para cultivar la mejor materia prima con la que elaborar sus vinos y, al mismo tiempo, devolver a la tierra más de lo que han recibido cada año.
Además, la bodega apoya la alta gastronomía, a restaurantes y chefs de todo el país, con eventos donde sus vinos forman parte de una armonía ideal con las creaciones de los más destacados Estrellas Michelin, favoreciendo la difusión de cocinas de toda España y del mundo, al tiempo que dan a conocer la cultura enológica de la comarca de El Bierzo, su paisaje y sus muchos valores gastronómicos, tradicionales, rurales y culturales.
En la actualidad, la bodega produce ocho referencias comerciales de vinos elaborados con las viñas autóctonas de la zona, Mencía y Godello, son Capricho Val de Paxariñas Godello, Capricho Val de Paxariñas rosado, Capricho Val de Paxariñas rosado cristal, Gancedo, Herencia del Capricho, Ucedo, Xestal y su vino dulce La Senda de la Higuera (Malvasía).