El foco de interés está centrado principalmente en Aragón, Asturias, Galicia y Navarra, regiones a las que espera llegar en los próximos meses
La Pepita Burger Bar, cadena gallega especializada en burgers premium, impulsa su plan de desarrollo, con el objetivo de ampliar su cobertura nacional de cara al último tramo del año.
Sin descartar ninguna localización, la empresa ha focalizado su esfuerzo en Aragón, Asturias, Galicia y Navarra, regiones a las que espera llegar a medio plazo, gracias a la labor de su departamento de expansión, que ha establecido un protocolo de acción para facilitar a los interesados todas las herramientas necesarias a la hora de poner en funcionamiento un restaurante de la marca.
Desde la central se hacen cargo de todo el proceso, desde la búsqueda del local, adecuación, apertura y asesoramiento, al apoyo constante de los diferentes departamentos para garantizar la mejor gestión de cada uno de sus establecimientos.
Además, La Pepita Burger Bar mantiene un acuerdo de colaboración con Banco Sabadell el cual ha diseñado un plan específico que engloba unas condiciones financieras especiales para los inversores que quieran entrar a formar parte de la cadena de hamburgueserías.
Tras más de 10 años en el mercado y una fuerte presencia en Asturias, Cantabria, Castilla y León, Galicia, La Rioja y País Vasco la compañía retoma su crecimiento con el firme propósito de mantener su posicionamiento en uno de los sectores más competitivos de la restauración en España.
Un desarrollo que pretende llevar a cabo de la mano de socios locales que aporten el conocimiento del mercado de las zonas de interés, pero sin necesidad de experiencia previa en gestión hostelera, labor de la que se encarga la propia empresa a través de un equipo de profesionales con dilatada trayectoria en esta labor.
La Pepita Burger Bar cuenta con una sólida estructura empresarial capaz de aportar a la red el respaldo que requiere la actividad diaria a nivel, logístico, formativo, comercial y en las áreas de marketing y comunicación.